No soy como crees

Capitulo 4: "Castigo: Parte dos"

¡Oh vamos¡ tiene que ser mentira, nunca en mi vida me han enviado a dirección y llega este chico y lo cambia todo, esto es lo peor del mundo, a puesto todo lo que tengo a que fue uno de lo simplones que fueron con el chisme al director, pero no me quedaba nada más que ir y ver que era lo que nos diría el director

Íbamos caminando atrás del director, yo iba por delante de Alex y Celeste ¿era que se llamaba la chica esa? Bueno, creó que si

Entramos a la dirección y la verdad no creo que quieran saber como es ¿cierto? Nos sentamos en las sillas que estaban adelante del escritorio y el director nos miró esperando que le contáramos lo que había ocurrido

-bueno cuentenme, ¿Qué ocurrio allá?- preguntó el director

-Yo le cuento director- Dijo Celeste y contó toda la verdad, esta chica se estaba ganando mi odio demasiado fácil, no digo que sea difícil conseguir mi odio pero esta chica pronto conocería mi lado para nada bonito

-bueno señorita Celeste puede retirarse, Alex y Emma ustedes dos tendrán un castigo que será limpiar la cafetería después de clases- dijo el director

-¿¡Qué!?- pregunté yo girtando, jamás en mi vida había limpiado, JAMAS y la torpe de Celeste hace que limpie, esta chica se ganó una venganza

-señorita Emma no grite y como escuchó tendrá que quedarse a limpiar-

-Pero... Pero yo tenía planeado...- dije yo aunque no termine la frase porque el director me interrumpió

-No interesa están son sus consecuencias para que la proxima vez que se le ocurra hacer uno de estos actos sepa que tendrá su castigo-

No dije más nada y sali de la dirección cuando sali iba tocando la campaña así que fui director a mi penúltima clase

Ya era la salida y la verdad no tenía ganas de limpiar, vamos, ¿Quién tendría ganas de limpiar? Nadie

Fui hasta mi casillero y guarde todos los libros y mi bolso y busque una ropa que tenía ahí que era cómoda, siempre tenía de repuesto, nunca se sabe, fui hasta los baños y entere en un cubículo y me cambie, la verdad esto me quedaba un poco ancho y me recordada mucho a la antigua yo, larga historia, recogí mi cabello en una coleta alta y guarde todos mis accesorios y asome la cabeza en la puerta para ver si todavía habían chicos ahí, no me arriesgaría a que me vieran asi, revise y no.había nadie fui corriendo hasta la cafetería y no había nadie excepto la señora de la limpieza

-aquí tienes todos los instrumentos que usarás para limpiar, quiero esta cafetería limpia- dijo ella entregándome unas cosas de limpieza y quede con la boca abierta que señora tan insolente, empecé a limpiar y ya había pasado una hora y el idiota de Alex no había llegado y la verdad ya me estaba hartando limpiar yo sola y para empeorar las cosas había empezado a llover y no sólo era un poco de lluvia si no una terrible tormenta, cuando estaba limpiando las mesas el llegó y me quedó mirando, la verdad me incomodaba un poco su mirada

-¿Qué esperas? ¿Una invitación?- le pregunté yo

-tal vez- dijo el sonriendo

-Oh perdone su majestad, le damos la cordial invitación a limpiar la cafetería aunque creó que es un poco ordinario para usted- dije yo haciendo una reverencia, el sólo soltó una carcajada, la verdad su risa era muy linda, yo también me empece a reír

-esta bien, esta bien limpiaré- dijo el y se puso a limpiar

-¿Te puedo hacer una pregunta?- le pregunté yo

-ya la hiciste- dijo el sonriendo, yo lo mire y el me miro -esta bien, hazla- dijo el aún sonriendo, que ¿no le dolian las mejillas de tanto sonreír?