Porque te cruzaste en mi camino (1ºy2º)

Capitulo VII

-Ella no esta saliendo con nadie, Ian -dijo el bocota de mi hermano. Maldito, siempre ayudando a los demás en vez que a su hermana.

Mis ojos se volvieron a cerrar con fuerza. No era necesario que hablara de eso en estos momentos.

-Solo que un chico anda coladito por ella y han salido unas veces, pero _____ sale con el por pena y ni siquiera lo ha besado.

-Y ni siquiera se arregla para salir -ayudo Rayen. Me guiño un ojo mientras yo fulminaba a los dos con la mirada. Ian no tendría porque estar sabiendo esto.

-Nunca me he arreglado para salir.

-Cuando salías conmigo si -dijo Ian burlón.

-¡Cállate Ian! -grite. Los tres rieron y entro Margot con una bandeja llena de galletitas.

-¿Por qué haces callar a Ian de esa manera, ____? -pregunto Margot aguantándose la risa. Al parecer estaban mejor que antes.

-Margot, estos chicos me sacan de quicio -dije frustrada. Ella rió y me tendió la bandeja, saque una galleta que tenia una forma rara y la mire. Pasó por todos los demás y hablo justo cuando Jean se estaba metiendo la galleta a la boca.

-¡Tienen veneno! -grito. Jean la alejo con rapidez y la miro con asco- Era para que no comieras -guiño el ojo- ¿Qué mitades tienen?

-¿Mi... tades? -dijo Ian confundido. Tres de nosotros fruncimos el ceño y las otras dos sonreían. Rayen se puso de pie.

-Tienen que encontrar su otra mitad. Es un corazón partido en dos la galleta -dijo ésta. La mire con cara de: "¿me estas jodiendo?" Y ella entendió que no sabia de que mierda hablaba-. Atrás de las galletas dice algo que solo con la otra mitad podrás saber.

-¿Y eso qué quiere decir? -pregunto Ian inspeccionando su mitad de galleta. Margot rodó los ojos.

-Tú elegiste esa galleta por algo, ¿no?

-Pues porque tengo hambre -dijo Jean. Margot lo fulmino y se quedo callado para que siguiera hablando. Mi hermano realmente le temía a su suegra, y aún no entendía por qué, si Margot era un amor. Bueno, cuando hacia sus raros inventos no.

-Ian, busca tu otra mitad -dijo Rayen. Ian hizo una mueca rara y me dieron ganas de reír.

-No sé de qué hablas -contesto, sin despegar la viste de la galleta que tenía en su mano.

-¡Tu si que eres idiota! -grito Rayen. Margot le pego en la cabeza y ella se sobo.

-¿Te imaginas si Luke está despierto y te escucha decir eso? -la regaño Margot. Las mejillas de Rayen se sonrojaron y reí-. Ven, Ian. Muéstrame tu gallera -Ian fue hacia ella y le tendió la galleta-. Pues veras...

-Al diablo, tengo hambre -Jean se metió su mitad y mi mitad a la boca. Los rostros de Rayen y Margot me dijeron enseguida que algo malo pasaría.

-Has cometido el más grande error de tu vida -dijo Margot.

-Mi amor, ¡¿Qué has hecho?!

-Oh, mi grandísimo Dios -las manos de Margot fueron a sus ojos y dirigí mi mirada de nuevo a Jean.

-Debe ir al baño -dijo Rayen. Iba a darle el mensaje a Jean, pero fue demasiado tarde, él ya estaba vomitando la hermosa alfombra que tenia Margot en la sala.

-¡Que asco! -grito Ian. Me voltee para no mirar tremenda asquerosidad.

-¿Por qué ah vomitado? -pregunte a Rayen. Me miro y sonrió de lado.

-Tienes que comer solo la mitad que te corresponde, no entero.

-Esto es una locura -dijo Ian- ¿Qué le han echado a esas galletas para que Jean se pusiera así?