XXII

1.4K 189 14
                                    

Nos contaste historias acerca del origen de las estrellas, luego pasamos a las historias de terror.

Tus ojos marrones se iluminaban bajo la luz de la fogata y los míos me ardían, pero no podía perderme una expresión, aunque me hiciera estremecer y ver detrás de mí.

Era una miedosa y te diste cuenta.

—Yo velo tu sueño, dulce chica —dijiste desde el puesto de vigilancia, al otro lado del campamento. 

Recuerdos de una vidaWhere stories live. Discover now