The Crown Is Mine (#TCIM 1) © [Editando]

Capítulo 16

Los jardines relajaban mucho a Liam, así que lo cité allí al día siguiente para contarle al fin lo de Stella. No iba a ser fácil, y mucho menos que lo entendiera, pero por intentarlo...

Nos sentamos en el mismo banco de siempre, cerca de una fuente y en el que de fondo se podía observar la fachada lateral de Palacio, dando al balcón de mi habitación.

Liam estaba de buen humor aquel día, y eso me tranquilizó bastante. Llevaba todo el día hablando de cuánto había aprendido tras un par de días con los soldados, utilizar estrategias de supervivencia y las armas.

No sabía por qué pero algo en todo aquello me inquietaba, y el hecho de que él estuviese emocionado por todo eso, me hacía pensar que de alguna manera lo estaban cambiando.

La guerra lo estaba cambiando.

- Pero bueno, no hemos venido aquí para que me escuches emocionado sobre todas estas locuras que estoy viviendo - se rio y yo tuve que forzar una sonrisa -. ¿De qué querías hablar?

Tragué saliva. Allá vamos...

- Es sobre Stella - comencé a decir, casi con voz temblorosa.

- ¿Qué pasa con esa Delacroix? Oh, no. No me recuerdes que tengo que casarme con ella - hizo una mueca de disgusto y yo jugué con mis manos.

- No es eso. Es... ella sabe cosas.

Liam ladeó la cabeza para mirarme con curiosidad. Sabía que era el momento, y cuando empecé a relatar, él mantuvo silencio y estaba más tranquilo de lo normal; y cuando al fin acabé de hablar, él simplemente suspiró.

- ¿Sabías algo? - le pregunté.

Él negó con la cabeza.

- Nada - respondió -. ¿Ella sabe que lo sabes?

- Lo dudo.

Me mordí el labio inferior. Era una situación muy delicada y yo no sabía si él estaba lo suficientemente cabreado como para delatarla y ponerla en evidencia delante de la Corte.

- No puedo creer que esté líada con un Bowyar - dijo para sí mismo, con los brazos cruzados -. Es decir, son Bowyars. Son el enemigo. ¿Como...?

- Es lo que dicen sobre el amor, ¿no? No entiende de obstáculos.

Liam no contestó y mantuvo la mirada al frente. Estuvimos en silencio durante ese rato y ninguno de los dos habló. Creo que estábamos asimilando que no íbamos a experimentar ese tipo de amor, porque era un privilegio que no podíamos permitirnos.

*****

Después de almorzar, solicité un permiso para poder hablar con los prisioneros, aunque sólo quería hablar con Cameron.

Nos dejaron una sala privada para poder hablar, y en cuanto los guardias se llevaron a Cameron de su celda, vi las miradas que se intercambiaron Adam y Jodie de preocupación, y yo simplemente intenté parecer lo más serena posible.

- Por aquí - murmuré.

El guardia que lo cogía por las esposas, nos guio por un pasillo, y abrió una puerta, en la que se encontraba una mesa y dos sillas en cada extremo. Ese guardia se quedó fuera, y nos dejó solos.

Me senté en una de las sillas y él, se sentó al otro extremo, quedando los dos frente a frente.

- Te he traído aquí porque quería decirte que Liam sabe de lo tuyo con Stella - le dije directamente.

Él simplemente parpadeó y como vi que no decía nada, me permití seguir hablando.

- No está molesto - seguí diciendo -. Al menos, a mí no me lo ha dicho abiertamente.