Life Written

Un capullo que renace para morir.

Hoy sé como se siente un capullo, encerrado, apretado, con la esperanza de algún día pueda ser una mariposa, volar y ser libre; ser feliz.
No me he desahuciado, pues la esperanza en aquél capullo, es lo único que me mantiene vivo. A veces dudo que pasará, tal vez me quede esperando en esta vida fúnebre y desolada. ¿Qué más da? Esta esperanza me mantiene vivo ¿Y eso importa no?

Así es como me siento cada vez que inhalo un poco de aire, una presión embriaga mi pecho, y deja inocuo mi cerebro. La ansiedad aprieta mis ojos al saber que me encuentro en la puerta del desván; después suelo recordar como se purgan las penas,  calorías y estrés. 

¿Cómo sentir soledad, cuando no la hay? ¿Cómo sentir dolor, cuando hay alivio? ¿Qué me debe amparar, si no hay lógica?

No puedo matarme  y seguir vivo. "¿Para qué quieres la solución?" Me repite mi conciencia porque ésta ya lo sabe, mas solo ésta siendo irónica.

Aunque este escrito estuvo motivado a un inicio para que recibas una auto-ayuda, ahora ya no lo será, puesto que no la quieres y seguirás en la lista de esperanza que todos llevamos junto a ese capullo que se encuentra acurrucado.

Este escrito va más allá que ayudarte, aquél solo desea mostrarte la infelicidad de no poder recibir ayuda, porque uno no la acepta. No se cuál sea tu problema, la verdad, ni me interesa. No te voy ayudar, solo te estoy regalando unos minutos para que pienses, si creíste que una maldita ayuda más en mi blog te van a sacar de ésta burbuja en la que vives. 

Al grano, la cosa dice así:  ¿Puede llegar a cambiar tu vida un libro de autoayuda? La respuesta es: Sí.

No es el escrito, no es la ayuda, eres tú.
Tú la estás buscando a pesar de que sabes  harás caso omiso a ésta, develará que tú realmente sí quieres esa ayuda aunque la rechazas, siempre haz sido la esperanza, pero te crees el capullo.

¿Qué es el capullo entonces? El problema.
¿Qué debes hacer? No losé, tú lo sabes.
¿Porqué soy la esperanza? Porque cuando escribí auto-ayuda, pensaste en que te ayudaría.
¿Qué será la mariposa del capullo que renace? TÚ.

Combina la esperanza con el problema; sé valiente, levanta las alas y vuela.