La Maestra De Mi Hijo (Completa)

CAPITULO 9 "LOS SOBRENOMBRES DE ANTHONY"

-¿Es en serio?- preguntó Anthony, mientras colocaba la bandeja de pan en la mesa. Katniss asintió y respondió sonriente, colocando los platos con fruta en sus respectivos lugares.

-Si fue...divertido- Anthony frunció el ceño y preguntó un poco confuso.

-¿Divertido? Estar en el mismo escenario con Christina Aguilera bailando *Ven conmigo* te pareció ¿Divertido?- Katniss soltó una risa a la que Anthony se le unió sin poder evitarlo, luego ella respondió:

-Tenía 14 años y estaba un poco enfadada, al principio, pero era genial estar con mis mejores amigas, bailando como si no tuviésemos huesos. Fue Divertido. Al final no importaba Christina Aguilera o todas las personas que estaban allí, lo que importaba era que, en una aventura loca, había subido al escenario junto a mis mejores amigas y nos reíamos como locas, escapando de los guardaespaldas y bailando- Anthony sonrió y dijo con orgullo:

-Eras una chica rebelde-

Katniss se llevó un trozo de manzana a la boca y respondió:

-No siempre fui tan aburrida ¿Sabes? Esas chicas me sacaban de mi rutina y cuando estábamos juntas nos olvidábamos de todo y nos metíamos en muchos problemas, pero sabíamos que, sin duda, no éramos solo amigas juntas, somos hermanas, de maneras iguales, que se aman y se cuidan. Siempre fue así, desde el momento en que llegue a su casa hasta ahora, después de tanto tiempo-

Anthony suspiró y Katniss vio la tristeza en sus ojos. En acto tranquilizador dijo tomando su mano:

-Cuando regrese podríamos ir al lugar que tú quieras y divertirnos. Dejare mis trajes formales, mi trabajo y haremos algo JUNTOS ¿Te parece bien?-

Anthony sonrió y asintió emocionado a lo que Katniss sonrió también, imitándolo, sin embargo aun sintiéndose feliz de tener a alguien con quien divertirse.

La melancolía la golpeó, ya que faltaban tres días para enfrentar muchas cosas en Londres, cosas que quizá le harían daño ¿Qué quería Seneca con ella? ¿Por qué, si en tres años él no la había buscado, lo hacía ahora? Y lo más importante ¿Qué quería de ella y las twins?

Las twins, su único consuelo, sus amigas desde que la bruja de su madrina la había enviado al internado. A ese lugar que, por las noches cuando estabas solo, era tan frío, pero era allí donde lo había conocido, donde su salvavidas la había ayudado a no hundirse, a no irse al lado de la oscuridad. Era donde Gale le había enseñado a sobrevivir, a luchar, a convertirse en lo que era ahora.

-¿Estas...bien?- preguntó Anthony haciéndola volver.

Katniss sonrió alejando los tristes pensamientos y respondió sabiendo que no podía mentirle.

-Es solo que...- Suspiro armándose de valor continuó:

-Días difíciles mi niño, días dolorosamente difíciles. Siento perturbarte-

Se disculpó. No podía decirle lo de Gale, no estaba preparada para compartir con alguien más su dolor. No ése, solo le pertenecía a ella.

-¿Sabes que puedes confiar en mí?- preguntó Anthony, enterneciendo a Katniss, quién respondió antes de tomar su café.

-Lo sé mi niño. Lo sé-

Peeta estaba a los pies de las escaleras escuchando cuando sintió un golpe en la nuca que lo hizo girarse. Sae lo miraba como si le hubiese robado una galleta, como cuando era un niño. Peeta se pasó la mano por el cabello y dijo nervioso

-¿Lo siento?-

-Niño malcriado, ni yo, ni Effie te enseñamos a ser así. Ahora sal de tu escondite. 'Las conversaciones ajenas no se escuchan' uno siempre mal interpreta las cosas- dijo Sae jalándole la oreja.