Parte/ 9

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Pero pudo más la compasión hacia la mujer que el miedo y los seis se encaminaron hacia donde se habían escuchado los balazos, esa carretera no era muy transitada pero si habían pasado unos cuantos coches.

Cuando llegaron al punto aluzándose con sus lámparas de mano no encontraron ningún cuerpo, caminaron un largo trecho de carretera, pero definitivamente no había nada.

Se regresaron haciéndose conjeturas, que era lo que había pasado con la mujer y optaron por creer que pese a lo que ellos pensaban un coche se había detenido y había auxiliado a la mujer.

Llegaron a la tienda y se quedaron profundamente dormidos habían sido muchas emociones en un solo día.

Al día siguiente Nancy y Alan ayudaron a los jóvenes a levantar la tienda, y se despidieron los jóvenes se adentraron en el bosque a acampar y ellos se dirigieron a la carretera a esperar su siguiente aventón.

No paso mucho tiempo cuando paso una camioneta una mujer iba manejando y se paró les dijo

 -Voy al  siguiente pueblo, con mucho gusto los llevo.

-Gracias señora

-Hacia donde se dirigen

-Vamos a Tennessee.

-Wow, jajaja,  diciendo sólo cuando se es joven se anima uno a hacer esa clase de locuras.

-Usted vive cerca de donde  nos levantó

-Sí, vivo en el pueblo anterior

 -¿Usted  no escucho unos balazos, nosotros oímos a una mujer correr pidiendo pidiendo auxilio y poco después a un hombre correr tras ella gritando traidora no te vas a escapar, fuimos a ayudarla pero nunca la encontramos.

La mujer los escucho atentamente sin interrumpirlos cuando terminaron de hablar les dijo

 ¿creen en fantasmas?

-Jajaja, pero señora estamos en el siglo veinte, los fantasmas no existen.

-¿Eso creen? Y si les dijera que la mujer que escucharon y el hombre son fantasmas.

-No, no señora usted debe de estar bromeando ya le dijimos que los fantasmas no existen.

-Bueno eso lo dirán ustedes, pero lo que si les digo es que hace diez años en una casa que está en las afueras del pueblo vivía una pareja de recién casados, el esposo se ausentaba algunos fines de semana se iba a pescar al lago, él se iba el viernes y regresaba el domingo, en una de esas ocasiones él se sintió algo mal y regreso al siguiente día, por supuesto su esposa lo esperaba hasta el siguiente día domingo, el llego por la noche cuando entro a la recamara encontró a su joven mujer con otro hombre, mientras los dos hombres se enfrascaban en una pelea, la mujer se vistió y salió rápidamente de la casa corriendo a lo largo de la carretera.

El esposo golpeo tanto al hombre que este cayó desmayado no contento con eso saco una pistola y lo mato, y salió persiguiendo a su mujer y donde ustedes escucharon los balazos allí quedo el cuerpo de la mujer muerta.

Él se regresó y como se le habían acabado las balas se ahorco, desde esa fecha cada año varias personas incluyéndolos a ustedes escuchan a la mujer, al hombre y los balazos cuando van a buscar a la mujer no encuentran nada, algunas personas la ven cuando va corriendo pero al llegar a ese punto se desvanece.





Mi noche con ElvisWhere stories live. Discover now