Jane Salvatore

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-Caroline, ¿no puedes simplemente decirme que está pasando? –pregunto Stefan, mientras que Caroline tiraba de su brazo por los pasillos de la universidad.

-Tienes que verlo o no vas a creerme. –dijo la rubia, al abrir la puerta de la oficina de Alaric, donde estaban Damon, Elena, Alaric y Bonnie.

-Bien, solo dilo... -empezó a decir Stefan, y cerró la puerta tras de él.

Caroline lo empujo en la silla al lado de Damon y se pasó al otro lado, junto con Alaric.

-¿Qué sucede? –pregunto Stefan a Damon.

-No tengo idea, a mí me trajeron también bajo amenazas y sucios juegos. –respondió Damon.

-Allí esta. –dijo Alaric, al terminar de buscar algo en el ordenador.

-Gracias a que Alaric es un profesor, tenemos acceso a los datos de los estudiantes... y así tendremos pruebas de que es verdad. –empezó a decir Caroline.

-Ve al punto, Caroline. –interrumpió Elena.

Caroline asintió.

-Durante una clase, que compartimos con Jane, la que secuestro a Elena... pasaron lista y dijeron su nombre, con apellido. –dijo, y Alaric giro la pantalla de la computadora.

Damon y Stefan leyeron el expediente digital.

-Ja-ne-Sal-va-to-re. –dijo la rubia haciendo énfasis en cada palabra.

Ambos fruncieron el ceño al mismo tiempo.

-¿Qué? –pregunto Damon atónito.

-Puede ser una coincidencia. –musito Stefan.

-¿Qué? –pregunto Caroline. –No es una coincidencia Stefan, esa chica quiere información de ustedes y tiene su apellido...

Todos miraban a Caroline, que parecía bastante emocionada con el tema.

-Ella es algún familiar de ustedes. –dijo por fin. –Es una Salvatore.

*

Connor pudo abrir la puerta de la cripta familiar Salvatore. Mientras que Jane vigilaba que nadie estuviera cerca, para molestar.

-¿Estás seguro que es aquí? –pregunto Jane de nuevo, al ver una aburrida cripta llena de Salvatore muertos en todas partes.

-Yo vi cuando pudieron la espada en esta cripta, es aquí. –dijo Connor.

Jane cerró la puerta tras de ella, al mirar alrededor.

-Tanto dinero tenía que tuvo una cripta. –musito amargamente. –Mi madre tuvo que ser enterrada en una fosa por falta de espacio, a pesar de ser la que soporto su terrible cara por años.

-Bueno, quizás fue por que murió después de Giuseppe... -dijo Connor. –Ya sabes, no pudo hacer nada para salvarla de la fosa porque estaba muerto.

Jane asintió, considerando la idea.

-¿Has visto esa espada, al menos? –pregunto mientras que Connor buscaba entre el lugar.

-Sí, si la he visto... Jane. –respondió Connor. –Y la necesitamos para deshacerse de Davos.

Jane frunció el ceño.

-Davos es demasiado rápido y fuerte como para morir por una espada. –musito la chica.

-Esta espada está hecha por brujas, especialmente para Davos. –dijo Connor, al detenerse en medio de la cripta, y agacharse observando el suelo.