Cap.3

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   Me fui a la madrugada de casa de Jake. Estaba feliz... Como siempre después de verlo. El le había mandado un texto a Embry para que me acompañara a mi casa. No sé por qué tanta cosa. Si la push es el lugar mas seguro que puede haber... pero es tan terco.

Embry: Hola chica de Jake.

Tu: Embry te dije que no me dijeras así. - Dije golpeándole el brazo. Pero luego me sobé la mano por el dolor, era como pegarle a una piedra.

Embry: Lo siento -Dijo riéndose.

Tu: Deja de burlarte - Lo señale con el dedo índice.

Embry: Ok mamá. -Eso me llamó la atención; era segunda vez en el día que me llamaban eso, y no la misma persona...

Tu: ¿De verdad soy tan amargada? -El me miró extrañado.

Embry: ¿Por qué lo dices?

Tu: No lo sé... tal vez, porque lo soy... vivo regañando a todo el mundo. Siempre me dicen mamá. A veces creo que soy demasiado correcta.

Embry: Solo bromeamos ____, no te lo tomes enserio. Además una chica correcta no se escapa de su casa y regresa a la madrugada. -Me reí -

Tu: No lo hice por diversión.

Embry: No...lo hiciste por amor. -Iba a hablar pero no me dejó -No me lo niegues. Te conozco. Lo amas. Y ese lobo tonto está ciego por no ver eso. -Dijo seriamente.

    Sonreí tristemente.

Tu: ¿No le digas a nadie, sí?

Embry: Sabes que no lo haría. Bueno a lo mejor lo recuerdo cuando entremos en fase.

Tu: ¿Qué? No, no, no -Lo tomé por la camisa - Ni se te ocurra pensar en esta conversación Embry. Yo... yo me muero si se entera, entendido?! ¡Me muero!

   Vi como tragaba grueso y me miraba asustado.

Embry: Para ser tan pequeña tienes un carácter fuerte.

Tu: No me conoces enfadada.

Embry: Este... ____ ya puedes soltarme. Llegamos, digo llegaste. -Me sonrió algo asustado.

   Lo solté no sin antes echarle una última mirada fulminante. Y entré por la ventana de mi cuarto cuidadosamente. Me cambié y con un suspiro me deje caer en mi cama. Con la imagen de Jacob. De mi Jacob. Que irónico. Mi Jacob... Como si realmente fuera mío. No... el estaba muy lejos de ser mio, ya había perdido toda  esperanza.

    Pasó una semana, no había vuelto a visitar a Jake desde aquel día. Mi padrastro me había pegado de nuevo. Ayer había llegado borracho y estaba demasiado dormida como para defenderme. Ahora estaba frente al espejo mirando el gran rosetón morado de mi ojo. No voy llorar... no voy llorar. Respire hondo y aguanté las lágrimas mientras comenzaba a maquillarme el golpe. Hoy Jacob volvería a la escuela de la reserva y no me podía ver así. Solo se alteraría. ¿Para que más problemas?

    Era estúpido. Pero estos golpes no me dolían tanto como lo que sufría en silencio por él. Además el sufrimiento ya era parte de mi vida. Estaba acostumbrada al dolor.

    Terminé de maquillarme, me puse unas gafas de sol negras para disimularlo más, ya que aún se veía un poco el golpe y tenia el ojo hinchado... Tomé mi mochila y salí rápido de la casa. Ni siquiera tenía ánimos de ver a mamá. Cuando llegue a la reserva a los primeros que vi fueron a los hermanos Clearwater.

   Seth en lo que me vio una gran sonrisa se formo en su rostro. En cambio Leah solo me miró con aburrimiento e hizo la mueca de disgusto de siempre. Suspiré.

   No podía creer que mi presencia aun la molestara. Desde que Jake me había contado el secreto de los chicos de la reserva me odiaba, aunque algunos miembros de la manada de Sam no estaban de acuerdo ni muy felices de que yo supiera su secreto, me aceptaron y me trataron bien. En especial Seth, pero ella... Era como si me odiara o algo parecido. Me resultaba muy incómodo no saber realmente que era lo que le molestaba de mi.

Seth: ¡___! - Exclamó abrazándome y alzándome del suelo para darme vueltas.

Tu: Dios ya bájame. Me mareas niño tonto. -Dije riendo.

   Volví a tocar el suelo. Y perdí el equilibrio un poco, al sentir todo dando vueltas. Seth se carcajeó.

Seth: ¿Estás bien? Lo siento...

Tu: Sí -Dije cuando ya todo había dejado de moverse y miré a Leah - Hola Leah.

Leah: Hola. - Murmuró entre dientes para luego dar la vuelta e irse. Suspiré.

Tu: Me odia. -Baje la mirada.

Seth: No le hagas caso - Me tomó la mano -Ven entremos.

Tu: No, espera -Me miró -Yo quería esperar a Jacob...

Seth: Oh vamos ___, el sabe el camino. Además ya entramos. - Me volvió a jalar y me quedé mirando hacia atrás para ver si llegaba, pero nada. Tal vez ya estaba adentro.

Haz de mi corazón un lugar mejor. [Editando]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora