Enamorada de mi profesor

capitulo 20

Christian

Han pasado los días desde que Jennifer se fue sin decir una palabra de mi casa y no e sabido nada de ella. Han pasado los dias desde que mi hermano me conto las calumnias que se hablan en la calle de ella y yo no e sido capaz de hablarle.

No me da el coraje... me siento cobarde.

Por un momento creí que lo que mi hermano me decía era verdad... pero luego me di cuenta que sólo eran mentiras.

Jennifer... por que tienes mi mundo de cabeza... nosotros no... no podemos estar juntos.

No podemos estar juntos, pero mi corazón amenaza por comenzar a latir por tí... pero no.

Yo no me puedo enamorar de Jennifer. No puedo.

Pero es tan curioso el poder que tiene sobre mí, la veo, y ni si quiera tiene que hablar... todo lo que puede hacer es sonreír y hacer de mi día, el mejor.

Pero que estoy sintiendo dios mio, ¿¡por qué!?.

¿Por qué corazón? Por que ella...

¿por qué te tiene que encantar su sonrisa? La que me puede dar un día por la mañana como si no hubiese llorado por la noche... ella es fuerte.

Por que debías fijarte en esos hermosos ojos pardos miel que tanto me fascinan.

Ese aroma tan exquisito que lo siento cada vez en mi almohada cuando me voy a acostar.

¿por qué ella?

Yo no me puedo enamorar de Jennifer, no ahora que volví con Tatiana.

La verdad es que no me lo esperaba, pero ella me buscó.

En mis tiempos anduve tan loco por ella que... lo daba todo.

Pero... ¿aun es así?.

Pero es que debería pensar en ella siempre, pero ya no es así...

Siempre que intento pensar en Tatiana, me aparece en mi cabeza unos hermosos ojos pardos...

Oh Jennifer... que voy a hacer con éste sentimiento hacía ti... no es un te quiero de amigos, es uno de te quiero cómo algo más. Un te quiero conmigo.

Pero nosotros no... no podemos.

¡MIERDA POR QUE TODO ESTO TIENE QUE SER TAN DIFÍCIL! -grito y el timbre suena.

Voy hacia la puerta y es Daniel.

Hace un rato me dijo que vendría a arreglar las cosas.

Le abro la puerta desde adentro y el en segundos entra.

-hola -me dice.

Yo le indico que tome a siento en la barra de la cocina.

-¿se te apetece algo? -pregunto para que el ambiente no esté tan tenso.

-una cerveza -dice sin mas.

Abro la nevera y saco una cerveza corona y se la paso.

El dispone a abrirla, bebe un sorbo y luego me mira.

Yo estoy apoyado en la barra mirándolo seriamente.

-Christian yo -suspira - quiero disculparme por la actitud del otro día... -esta arrepentido - no debí a ver dicho cosas como las que dije sin conocer realmente a... Jennifer.

Jennifer, Jennifer, Jennifer...

Me pongo a temblar y mi corazón se acelera con tan solo escuchar su nombre.