Blood Of Innocents (Peeta Y Tu) TERMINADA

Capitulo 27: ¿Dónde estoy?

Abrí los ojos lentamente mientras mi vista se comenzaba a aclarar, cada vez enfocaba el oscuro lugar en el que estaba, ¿Estaba muerta?¿así es morir? Muchas preguntas venían a mi mente, como ¿Porque estoy usando una bata? o ¿porque estoy acostada en algo frío y metálico? no sabía que pasaba hasta que una luz me dejo ciega, cerré los ojos y cubrí mi cara por instinto, luego me fui acostumbrando a la luz, me senté y mire a mi alrededor, una habitación acolchonada blanca, estaba acostada en una barra de metal, comencé a sospechar que algo malo estaba por suceder, respire hondo, un sonido me saco de mi lugar e hizo que volteara, una puerta había salido de la nada por ahí entro el mismo demonio en persona, Snow.

-Señorita Blackwood, un gusto verla nuevamente.- dijo entrando-

-¿Donde estoy? -pregunte mirando cuidadosamente a Snow-

-Mi querida señorita Blackwood usted esta en el Capitolio

-¿Que estoy haciendo aquí? -digo con la voz fría-

-Un Aerodeslizador la trajo aquí.-explicó.- porque necesito que me ayude

-¿Y yo porque lo tengo que ayudar? -lo mire amenazante.-

-Bueno es por su propio bien -dijo haciendo una sonrisita- ¡Agentes! -gritó-

En eso unos Agentes de la Paz entraron y caminaron hacia mi, tomaron mis brazos y me lanzaron a la camilla metálica, mi espalda comenzó a doler, luego, los Agentes de la Paz me arrodillaron y pusieron mis manos atrás, mire el suelo como una niña castigada, no quería darle la satisfacción a Snow de verme sufrir. Una mano tomo mi cabello y lo jalo para atrás haciendo que mi cabeza subiera.

-Mireme señorita Blackwood -dijo Snow a lo que yo obedeci - ¿Sabe porque no la dejamos morir?

-Supongo porque le resulta satisfactorio verme así -respondí furiosa-

-No la dejamos morir porque, repito, queremos que nos ayude y si colabora la dejaremos libre, pero ahora tiene que conocer a sus vecinos de celdas -dijo riendo-

Snow me puso un pequeño saco en la cabeza y los Agentes de la Paz me tomaron mis brazos y me elevaron llevandome a mi "celda" como dijo Snow, tardamos muy poco cuando escuche otra voz, una voz conocida, Annie.

Abrieron una puerta por lo que escuche y luego sentí como era lanzada por los aires hasta caer al suelo, me quite el saco de la cabeza y escuché como cerraban la puerta de mi celda, los Agentes de la Paz se fueron y luego un silencio inundó la habitación, todo se encontraba a oscuras, mi respiración se estaba alterando, no sabía que iban a hacer conmigo, tal vez me iban a matar cuando les diera los que quieran.

-¿Hola? -pregunto alguien en algún lado de la habitación.- ¿Alguien está ahí? ¿Annie?

Abrí los ojos al tope, con todo el temor del mundo vacile en hablar, no podía ser él.

-¿Peeta? -pregunte con la voz temblorosa.-

-¿___? -pregunto el chico.-

-¡No puede ser! ¡Peeta! -grité.- ¿Donde estás?

-¡___! -respondió.- Acercate a mi voz.

-Eso intentó.- comencé a caminar en la oscuridad, estire mis brazos para buscar algo, un cuerpo o una pared.-

-¿____? ¡___! ¡Soy yo, Annie! ¡responde por favor!.- gritó la chica.-

-Annie, tranquila.-respondí intentando hablar lo más tranquila posible.-

-Maldita sea ¡¿Que demonios quieren?! -grito Peeta.-

De repente las luces de encendieron acompañadas con un ruido agudo, tanto que me hizo caer, trate de tapar mis oídos pero no cubría nada, mi cabeza comenzó a doler y la luz no ayudaba mucho. El sonido de detuvo, abrí los ojos adaptandome nuevamente a la luz, las celdas, Peeta estaba a mi derecha y Annie frente a la mía, a su lado estaba Forcate, su cabello rojizo había sido rapado y se encontraba en el suelo, busque por la habitación a alguien más hasta encontrarme con Johanna, ella estaba desmayada y la mantenían encadenada, un grupo grande de agentes de la paz entraron al lugar, se dividieron y nos encadenaron justo al fondo de nuestras celdas.

-Que gusto que ya despertó, señor Mellark -hablo snow, entrando a la habitación - usted ya deberia de saberlo

-No estamos par adivinanzas.- hable furiosa.- ¿Que demonios quiere?

-Es simple, solo quiero el escondite de los rebeldes.-suelta.-

-...no se de que está hablando-menti, ahora todo tenia sentido, Katniss no estaba aquí ya que el plan funcionó.-

-Muy bien si no quiere cooperar.-Snow se dio la media vuelta dispuesto a retirarse.- Traigan a Mellark

-¿Que? -susurre.- ¿Que van a hacer con él? -dije desesperada al ver como lo tomaban a la fuerza.-

-Sueltenme.-Peeta comenzó a luchar pero era en vano, habían demasiados Agentes de la Paz-

-¿Que no se nota? Vamos a jugar algo...- él paró de hablar para comenzar a toser, al recuperarse se limpió con un pañuelo "¿Eso es Sangre?" Pensé. Snow continúo- el primero que me de lo que quiero gana, por ahora, Peeta tiene la ventaja.-este sonríe y sale del lugar.-

Las luces se volvieron a apagar.

-¡No! ¡No! -avance lo más que pude pero las cadenas tiraban de mi.- ¡Peeta!

Escuche como se lo llevaban, me limite a seguir gritando su nombre hasta que ya no pude más y me deslice hasta caer al suelo, llego un punto en el que hubo un silencio abrumador, pero eso duro un segundo ya que comenzaron los gritos, los gritos de tortura, los gritos de Peeta.