Dislexia |H.S|

DOCE: Héroe por una noche

-¡Luna!- gritó Harry, pero ella ya se había ido.

Sin duda ver aquella escena fue como un puñal al pecho para Luna, pero ¿por qué había dolido tanto? Harry no era más que su amigo. Además, también estaba bastante borracha como para pensar bien las cosas.

Luna iba caminando por la acera, no sabía para donde iba, sólo sabía que no quería estar cerca de esa fiesta y de Harry. Todo a su alrededor le daba vueltas y se tambaleaba de un lado a otro al caminar, decidió sentarse cuando ya no pudo estar más tiempo de pie. Sin duda ya no volvería a beber demasiado tequila.
Sintió una oleada de decepción e inmediatamente comenzó a llorar.
No le importó sollozar ya que se encontraba sola, sólo quería desahogarse y llegar a su casa para dormir en su cálida cama y quejarse con Matty sobre que Harry es un idiota. O tal vez no lo sea, no del todo.

Luna levantó la cabeza cuando sintió una luz chocar contra su cuerpo, un auto se estacionó frente a ella, al principió no lo pudo distinguir, entró en pánico, de seguro era un psicópata secuestrador de adolescentes lloronas, pero su pánico se tornó en sorpresa al ver a Harry salir del auto. Él se acercó lentamente a ella y se puso de cuclillas para poder estar a su misma altura, Luna sorbió su nariz y lo miró con cautela.

-Hey... -habló Harry con un tono de voz un poco bajo.

-¿Qué quieres?- dijo Luna con frialdad.

Harry pasó una mano por su cabello y exhalo.

-Me preocupó la forma en la que te fuiste de la fiesta.

Luna rodó los ojos y negó con la cabeza.

-Si, claro; Luna la típica mojigata que sale llorando de las fiestas.

Harry sonrió a medias al escuchar el comentario sarcástico de Luna.

-Vaya que estás borracha, debería de llevarte conmigo.

Luna se cruzó de brazos negándose ante la propuesta del rizado.

-Ni en sueños me voy contigo- dijo Luna mientras se paraba con torpeza ya que seguía un poco ebria.

-Bien, vete sola entonces- retó Harry con una mirada de superioridad.

Luna lo fulminó con la mirada y dio media vuelta para iniciar a caminar, no tardó mucho en comenzar a tambalearse y a maldecirse a sí misma por ser tan orgullosa.

-Primero; estás demasiado ebria como para caminar sin tropezar, y segundo; el camino para tu casa está al otro lado.- Dijo Harry recostado en la puerta de su auto.

Luna bufó sonoramente, rendida ante las palabras de Harry, se sentó en medio de la calle y se cruzó de brazos, en ese momento Harry no pudo evitar pensar en que era la primera chica que se veía adorable mientras estaba ebria.

(...)

Por otro lado, Jack se encontraba buscando por todos lados a Charlotte ya que se había ido con un chico misterioso al inicio de la fiesta. Estaba bastante preocupado por su amiga, quién sabe si el tipo con el que se fue era un violador y asesino serial. Después de buscar por todos los cuartos, Jack decidió seguir buscando entre la multitud que estaba abajo, iba empujando a todos los chicos que se atravesaban en el camino hasta que un cuerpo se estrelló contra él.

-Ten más cuidado, idiota- gruñó Jack, levantó su cabeza para ver quién era y en el instante se sintió aliviado pero a la vez preocupado.- Matty, ¿qué haces aquí?

Matty tenía un semblante preocupado.

-Luna aún no llega a casa y mamá está preocupada.

Jack no quiso decir que Luna había huido y que posiblemente estaba con Harry.