Capítulo 3: Estamos en One Direction

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Conociendo la fama. Capítulo 3.
Harry
Harry abrió los ojos y miró el reloj digital de la mesita. Mierda, las ocho y media.
-Ni, nos hemos dormido.
Niall parpadeó. Harry se estaba levantando y buscando la ropa. Se suponía que a las nueve debían estar en el piso que compartían con el resto. Pero estaban realmente tan cansados.
-Que frío hace en este maldito piso -protestó Harry poniéndose los calcetines. Niall se frotó los ojos y abrió el cajón de la mesita de noche, o lo intentó, porque se atascaba. Al fin abrió de un tirón y sacó una muda de ropa limpia.
-Hay que dejar las sábanas en la lavandería, y el taxi tarda veinte minutos.
-Ya me estoy vistiendo.
Harry intentó coger los zapatos, pero no encontraba uno de ellos. Niall le miró mientras se ponía la sudadera.
-Estás de mal humor -Niall no preguntó. A esas alturas ya llevaban juntos cinco meses, y se conocían bastante bien.
-Niall, no estoy acostumbrado a esconderme, y esto empieza a agotarme. Tenemos que escondernos en esta ratonera como si estuviésemos haciendo algo malo.
-Es necesario. Tú me lo dijiste.
-Yo no siempre tengo la razón en todo, Niall.
-No me grites.
-No te estoy gritando.
-Lo estás haciendo, y yo no fui quien firmó ese contrato.
Harry se sentó en la cama.
-Pero funcionó, ¿no? Estamos en One Direction.
Niall guardó silencio. Harry también. De repente se volvió despacio hacia él.
-¿Ni?
Niall no contestó. Harry pasó de rodillas por encima de la cama y le tocó el hombro.
-No te quería gritar.
-Yo no tengo la culpa. Lo hago lo mejor que puedo.
-Ya lo sé -Harry le abrazó por detrás. -Es sólo que todo es raro.
-También es difícil para mí.
-Ya lo sé. -Harry le besó. Niall le devolvió el beso y Harry olvidó el reloj. Se comieron a besos y volvieron a quitarse la ropa.
Harry reconocía que estaba de un humor raro, pero hasta aquel día no lo había pagado con Niall.
Eran las nueve y veinte y seguían abrazados y desnudos.
-De verdad debemos irnos. -dijo al fin Harry.
Decidieron compartir el taxi. Sabían que estaban arriesgando, pero...Harry le agarró la mano.
-Cariño, ¿por qué no le dices a mamá Maura que vengáis a Holmes Chapel en Navidad? Pasaremos unos días juntos.
Niall sonrió.
-Seguro que le encantará la idea.
El taxi se detuvo una calle antes. Harry y Niall caminaron separados y entraron en el edificio. Cuando llegaron al piso Liam les miró preocupado. No por la riña de sus representantes por llegar tarde, sino porque se dieran cuenta de que venían juntos.
Louis no les quitó ojo. Les miró fijamente. Niall y sus mejillas rojas. La cara de Harry. -Fuimos juntos al centro. Hubo un atasco. -dijo Harry.
Entraron en la cocina. Liam fue tras ellos.
Louis miró a Zayn.
-¿Crees que Harry se está tirando al crío?
Zayn se recolocó en el sofá. Si, lo creía, pero eso no era su problema, ni de nadie en realidad.
-No lo sé. De todas formas, no es mi problema con quien folla Harry.
Louis volvió su atención a la televisión.
Niall
Esa noche no podía dormir. Así que el y Harry, como tantas otras, se pasaron el tiempo mandándose mensajes de texto.
Les habían ofrecido tranquilizantes para dormir, pero hasta el momento el y Harry se resistían, no sabía los demás.
Le entraron ganas de ir al baño. Se levantó y caminó descalzo. Aún llevaba el pijama de Spider-Man que había metido en su maleta.
Y como llevaba ese pijama el día en que perdió la virginidad, era su favorito.
Se cruzó con Louis en el pasillo.
-Spider-Man -dijo Louis un poco riéndose. Niall no le contestó y entró al baño.
No iba a entrar en las provocaciones de Louis.

Niall
Meter las cosas en la maleta sin su madre para colocarlas no fue tan fácil como esperaba. Pero entraron.
Era Navidad y la pasaría junto a Harry.
La cercanía de las fiestas y saber que las iban a pasar juntos había mejorado el humor de Harry, lo cual hacía que Niall estuviera más feliz.
Como ya les habían empezado a pagar, Niall ya tenía algo de dinero y había podido salir a comprar regalos para su familia, la de Harry y para Harry.
Y eso también era difícil de meter en la jodida maleta.
Tenían que coger un taxi en un rato para recoger a Maura en Heathrow y luego ir a Holmes Chapel.
Estarían juntos desde el día 23 hasta el día 2 y sólo pensarlo ya le alegraba.
Harry entró en su habitación. Llevaba un gorro de Papá Noel y sonreía.
-¿Todo listo?
-Si, pero se supone que no deberían saber que viajamos juntos.
-Lo sé. Salimos por separado.
Niall cerró la maleta. Harry se acercó más a él y bajó mucho la voz.
-Mi madre me ha dicho que va a poner a tu madre en mi habitación y para nosotros la cama grande de invitados. Vamos a poder estar juntos toda la noche. Todos estos días.
-Dios, Harry.
No habían podido hacer el amor, ni tocarse ni besarse desde hacía tres días por culpa de algunos compromisos con el grupo.
-Estoy deseando estar contigo. -Harry se arrimó más. -Hoy por la noche te juro que te tengo que besar primero en el cuello... y luego iré bajando... y quiero meterme en la boca esa cosita que tienes sólo para mí.
-¿Cosita?
-Bueno, esa cosota.
Niall suspiró. Se dio la vuelta y lo besó. Harry jadeó. Niall vio por el rabillo del ojo la puerta abierta.
-No debemos.
-Lo sé.
Pero continuó besando. Niall suspiró mientras Harry le acariciaba por encima del pantalón.
-Niall, creo que está camiseta es tuya... Perdón.
Niall y Harry se apartaron a la velocidad de la luz, pero ya era demasiado tarde y Zayn les había visto.
-Zayn, esto... -empezó Harry.
-No te molestes, tengo ojos. Tranquilos, no es que me importe.
-¿No vas a decir nada? -preguntó Harry.
-No, no voy a decir nada. En realidad sospecho que venís estando juntos desde el programa.
-Gracias -dijo Niall ruborizándose.
Zayn se encogió de hombros y se fue.
Niall suspiró.
Harry
Maura les abrazó a los dos con fuerza.
-Mis niños. Cómo habéis crecido. Y se os ve cambiados. Y cansados.
-Mamá Maura. Estamos trabajando mucho. Pero es divertido -dijo Harry.
-Ahora vais a descansar y a comer bien.
Cuando llegaron a Holmes Chapel Anne, su marido y Gemma salieron a recibirlos.Tras los abrazos entraron en la casa.
-Maura, te voy a poner en la habitación de Harry. Los chicos necesitan una cama grande -dijo Anne.
-Mamá... -dijo Harry ruborizándose.-Vamos a subir las cosas, Ni.
-¡No echéis ahora un polvo, cenamos en media hora! -gritó Anne. Maura parpadeó. -Hay que vigilar a estos chicos.
Después de cenar Harry miró a su madre y dijo con timidez.
-Estos días hemos trabajado mucho. Estamos cansados y...
-Ya, vais a acostaros. Algunos queremos ver una película, así que intentad no ser muy ruidosos.
-Imposible -dijo Maura.
Harry cogió la mano de Niall y corrieron escaleras arriba. Tras un paso rápido por el baño corrió a la habitación.
-Tres días -dijo Harry -no sé cómo he aguantado tres días... -Niall iba en chándal, así que Harry sólo tuvo que dar un tirón.
-Ni yo. -Niall se sentó sobre la cama. Harry le besó y tal y como había prometido bajó sus besos. Se arrodilló en el suelo y le tomó con la boca. Niall jadeó.
Anne subió el volumen de la televisión.

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Conociendo La famaحيث تعيش القصص. اكتشف الآن