A veces quiero llorar y maldecir tu nombre
A veces quiero gritar por solo recordarte
Hay días en que no quiero despertar
Hay noches en que no quiero dormir.
¿La razón?... La razón aun no la hallo
A veces quisiera llamar y reclamarte
A veces quisiera tenerte enfrente y golpearte.
Y entonces recuerdo... Todos esos días pasan en mi mente como fotografías
Desde el día en que te vi hasta el día en que te alejaste para no volver.
Hay días en que me odio por amarte,
Hay días en que no comprendo ¿cómo pude amarte?
Hay días en que te extraño, hay noches en que te odio pero...
No hay día que no piense en ti.
No hay día que no pronuncie tu nombre
Y no hay noche que no duerma pensando en ti.
¿Mi almohada? Mi almohada lleva tu nombre, mi mente te recuerda como si todo hubiese sido ayer
Mis manos te buscan y mi corazón palpita.
A veces quisiera odiarte y cerrar los ojos sin ver tu rostro en mi memoria.
Quisiera que tu recuerdo no me haga daño.
Y luego...
Hay noches en las que quisiera viajar a ti,
a cambio, solo tengo noches solas y grises.
Noches en las que lloro al ver tu fotografía, noches en las que me enojo hasta con la vida, noches en las que te odio por no regresar a mí.
Si, te odio.
Te odio porque no me amaste lo suficiente
Te odio por no quererme como yo a ti
Te odio por no sufrir como yo lo hago
Te odio por haberme olvidado
Te odio porque a pesar de tanto daño sigues apareciendo en mi vida, sigues llegando en mis noches sigues amargando mi existencia con tu recuerdo, con tu esencia.
