ᨳㅤֶ֢ ㅤ۫ 𝐁𝐞 𝐬𝐭𝐢𝐥𝐥 ᵎ

Capítulo 55.

Ya había pasado un tiempo ya, el pequeño Dae era un bebé de apenas cinco meses que balbuceaba todo el tiempo y peleaba con JeongHan cada vez que no iba por el a tiempo, el peli-largo estaba en unas cortas vacaciones que el peligro Dae estaba disfrutando mucho.

La vida  en el departamento de ellos desde que Dae balbuceaba era un completo caos realmente ya que todos el tiempo el mantenía hablando de algo o como o peleando con alguien pro cualquier razón, como en en ese momento que peleaba con uno de los miles de peluches que tenía.

Chae y Joshua se estaban organizando para irse a trabajar y a estudiar mientras JeongHan por su parte se había deportado para darle comida al glotón de Dae quien inició con sus alegatos desde mañana.

Dae no hacía más que balbucear un millón de cosas al peluche y luego tirarlo al suelo balbuceando otro millón más de cosas más las cuales eran completamente desconocidas para todo a allí, a excepción de una: la carita de súplica. Esa todos allí ya la conocían y era la misma que empleaba con Chae frente a él para que le diera nuevamente le peluche.

- Dae, esta será la última vez que te doy el peluche, la próxima se queda allí en el suelo. - Dijo por enésima vez Chae.

JeongHan quien miraba todo desde la cocina suspiró un poco siendo sorprendido por su esposo quien lo abrazó por la espalda dándole un beso en la mejilla.

- ¿Qué ves, mi amor? - Cuestionó Joshua.

- A Dae. Amor, él es tan ruidoso y agresivo, ¿Eso es normal en un bebé de apenas cinco meses? -  Cuestionó JeongHan devuelta algo preocupado.

- Claro que sí, amor. Está creciendo y es normal. -Tranquilizó Joshua.- Además, es un bebé.

- Es que mantiene peleando por todo, incluso parece someter sus peluches a una dictadura todo el tiempo.

Joshua rió un poco ante la último para después darle la vuelta a JeongHan y besarlo lentamente en los labios para tranquilizarlo un poco aunque sabía que eso era imposible.

- Es solo un bebé, amor, déjalo. -  Murmuró Joshua.

JeongHan asintió pasando sus manos por el cuello de Joshua y sonriendo levemente mientras sus labios se volvían a unir en un beso nuevamente.

- ¡Mamá Han, Dae otra vez me tiró el peluche en la cara! - Gritó Chae desesperada ya de su hermanito quien reía a carcajadas por lograr su cometido.

- Te lo dije. - Murmuró JeongHan mirando a Joshua.

En la casa de MinGyu y WonWoo todo estaba muy ruidoso como de costumbre. WonWoo estaba intentando ponerle unos zapatos a su nena, pero ella se negaba a ello moviendo sus pies e impidiéndole a WonWoo que le pusiera tal cosa. El pobre WonWoo ya no sabía qué hacer exactamente, estaba desesperando porque debía salir con JeongHan, pero HwaMin no le estaba ayudando mucho.

La pequeña estaba llorando fuertemente mientras balbuceaba cosas a hacia WonWoo y movía sus pies, ella no le agradaba para nada tener zapatos.

- ¡MinGyu! - Llamó exasperado WonWoo.

- ¿Si, mi amor? - Respondió MinGyu desde el sofá que estaba viéndose una de sus películas favoritas.

- ¡Tu hija no se quiere dejar poner los zapatos!

- HwaMin. - Advirtió MinGyu.

Siempre era lo mismo, WonWoo lo llamaba para le ayudara, pero él, por su lado solo seguía en lo suyo ignorando completamente al pobre WonWoo que ya no tenía más paciencia.

- Voy a enloquecer, contigo Kim Hwa Min. Debería ser una buena niña y dejarme ponerte los zapatos rápido ya que entre más rápido mejor, pero no, contigo siempre es tan imposible. - Regañó WonWoo haciendo llorar más a la bebé.

En ese momento, por primera vez, MinGyu apareció en la habitación con una sonrisa en sus labios acercándose a su pequeña quien lo miró e inmediatamente hizo puchero moviendo sus manos.

- Esa mamá es mala, ¿Cómo puede regañar a una bebé tan obediente y buena como mi nena, ¿Cierto, princesa? - Dijo MinGyu en su tono infantil.

La pequeña inició a balbucear hacia MinGyu quien ahora sonreía mientas WonWoo rodaba los ojos negando levemente, MinGyu el quitó el zapato y comenzó a ponérselo con cuidado mientras escuchaba las quejas de su hija hacia su esposo.

- Sí, mala mamá, ¿Cómo puede llamarte por tu nombre completo? Ni siquiera considera que eres su hija.

- ¿Enserio? - Dijo WonWoo.

- Shh, cariño, estoy tenido una conversación con nuestra hija. - Dijo MinGyu cargando a la pequeña- Vamos a jugar, mi niña.

Oh, no.

Los juego de MinGyu eran muy agresivos o eso consideraba WonWoo que le había tocado calmar el llanto de su nena en tres ocasiones distintas por lo 'juegos' de su esposo.

MinGyu dejó a la pequeña en el sofá para después de ello hacerla rodar hasta la punta y Justo cuando iba a caer, la sostenía impiendoselo. A HwaMin ese juego le asustaba, pero le gustaba desde más pequeña ya que MinGyu siempre lo jugó con ella y con Dae quien reía a carcajadas.

La puerta de su casa fue golpeada, así que WonWoo se acercó a MinGyu indicándole que subiera a HwaMin al carrito en el que la llevaba todo el tiempo ya que su bebé, a pesar de tener cinco meses era muy pesada.

Una vez MinGyu hizo lo que WonWoo decía salió con su bebé encontrándose allí afuera a JeongHan limpiando a  Dae que iba comiéndose un helado.

- ¿Nos vamos? - Cuestionó WonWoo sonriendo.

JeongHan también tenía en un carrito a su niño y no era porque fuera pesado, sino porque en algunas ocasiones Dae se dormía y le tiraba manotazos a JeongHan, además, así era más cómodo caminar.

Los dos chicos junto con sus bebés iniciaron a caminar hacia el ascensor para después ir a comprarle ropa nueva a sus bebés que ya harto la necesitaban, más que todo la bebé de WonWoo.

- ¿Sabes? El bebé de SeokMin es ta tierno y delicado. Ojalá Dae hubiera sido así. - Dijo JeongHan escuchando lo balbuceos de su hijo nuevamente.

- Dímelo a mí, Hwa Min aveces es tan, ¡Ah! - Dijo WonWoo sonriendo- Aunque sí es delicada.

- De seguro porque es niña.

Ambos continuaron caminando cuando a lo lejos a SeokMin caminado con su novio y con su bebé, era graciosos porque SeokMin tenía la costumbre de abrazar a Samuel cuando iban por la calle ya que según él, así nadie lo miraba.

- ¡Ah! Lo olvida, ¿Dino ya te dijo? - Habló WonWoo.

- ¿Qué cosa?

- Quiere que tú y MinGyu sean los padrinos y que Dae, Hwa Min y Chae los niños de honor o qué sé yo, algo así dijo.

- ¡Oh!  ¿Enserio? No lo sabía.

- Pues ahora lo sabes.

Mientras ellos hablaban Dae y HwaMin se dedicaban a balbucear cosas sin sentido mientras jugaban cada uno en su respectivo carrito, era gracioso verlos a ambos, después de todo eran tan pequeños.