Real (Barry Allen/Flash y _______)

| 12 | Lastimarte

Barry se ofreció a llevarme a mi departamento.El doctor me había dado unas pastillas y me aseguró que solo estaba aturdida y que durmiendo y comiendo bien no tendría ningún problema. No había daño y tampoco secuela. Barry se sentía culpable por haberme golpeado y se disculpó en todo el trayecto. Sabía que había sido un accidente, ,pero había algo que no encajaba en su versión y eso me tenía confundida.

-Bien-dijo mientras se paraba en la puerta del edificio.- Si necesitas algo llámame y vendré corriendo.

Reí y le sonreí por su comentario. Yo no quería que él viniera corriendo, quería a alguien más.

-Gracias,estoy bien.- Sonreí tratando de darle paz.

-Es enserio si necesitas llámame- repitió mientras se rascaba la nuca.

-No dudaré en tomar tu oferta,nos vemos mañana.

-Adiós-agité mi mano en su dirección mientras caminaba hacia la puerta.

-Adiós-respondió a mi gesto sonriendo.

Abrí la puerta y caminé a mi departamento. Sentía las escaleras más largas pero me pareció normal por el golpe. Cuando logré entrar al departamento y vi una silueta mis sentidos se pusieron en alerta y sentí miedo. Encendí la luz rápidamente y lo miré.

-Casi me matas del susto-reclamé mientras me recargaba en la pared.

-No era mi intención, pero no podía entrar por la puerta.

-¿Qué haces aquí?-pregunté dejando caer mi bolsa en la mesa de la entrada.

-Quería ver como estabas.- Caminó hacía donde yo estaba y se detuvo a unos metros de mí.

-Bien, creo. Barry me llevó al hospital y me dijeron que estaré bien.

Flash sonrió y fijó su mirada en el hematoma que tenía en la frente. El doctor me había dicho que desaparecería en unos días y que me pusiera hielo para ayudar a desinflamarlo.

-Es un buen tipo-dijo mirando mi golpe y acariciando mi mejilla.

Sonreí pero él su toque, se sentía familiar y cálido. Pero él no sonrió de vuelta.

-¿Estás bien?-pregunté mientras me acercaba a él. Quedamos frente a frente y él me miró. Deslizó su mano por mi rostro y la detuvo en mi hombro ejerciendo un poco de fuerza para que no me acercara más.

-No. Me quedé quieta y retrocedí ante su respuesta.-No quiero lastimarte.