Anime One Shot's

🍋Subaru Sakamaki

No se porque aquella chica llegaba a nuestra mansión, es estúpida, es igual que Yui pero, con un buen cuerpo.

Akarihime Kurosaki, una chica de ojos violetas, pelo negro como la misma noche y un cuerpo que seguro todas las chica envidian. Pero ellos solo conoces ese lado tierno de ella, cuando en realidad es pervertida, bipolar y sobre todo tonta.

-¡No se porque tienes que revisar si he robado tu daja!

-Porque siempre andas molestándome.

-Te juro que yo no lo tomé, fue Raito.

-Si, claro.

-¡Sal de mi habitación! ¡Ahora!

La miré, pero realmente estaba enojada, suspire y salí de ahí dando un portazo.

(...)

-Que niña tan irrespetuosa, no se ha presentado a comer.

Comentó Reiji acomodando sus lentes, miré lo que sería su lugar, algo faltaba y era su sonrisa y su risa.

Me levanté de mi asiento y me retiré, escuché a Reiji suspirar y me fui a verla.

-¿Akari?

-Vete, no estoy de humor.

-Reiji se está enojando, al menos come algo.

-No quiero.

Intenté abrir la puerta pero tenía llave, mierda. Tendré que recurrir a otra entrada.

Salí afuera y entré por su ventana, ella estaba en posición fetal sobre la cama, la oía gemir.

-¿Akari?

Ella se volteó asustada.

-Vete.

Había olor a sangre. Era un delicioso aroma, me acerqué a ella y me puse sobre ella.

-Sal. No estoy de humor.

-Dejame tomar un poco.

Y antes de que volviera a reprochar la tomé del cuello para beber sangre, se quejó, y ahora que lo noto, su sabor es diferente al de otras veces.

-Subaru, basta, me voy a quedar anémica.

No quería soltarla, su sabor es delicioso.

Sentí que se rendía, no luchaba para apartarme, al separarme ella estaba frunciendo el ceño y su mano estaba sobre su abdomen.

-¿Qué te ocurre?

-¡Vete!

Su voz salió con dolor.

-Dime, que pasa.

-Ay, no..., no quiero, ay.

Se puso en posición fetal, me tumbé a su lado y la abracé.

-En serio, vete, no es nada serio.

-Nunca te vi así.

-Es porque, es la primera vez.

Tomé su mano y nos quedamos así, el ruido de la noche era lo único que se escuchaba.

-Estoy en mi periodo.

-¿Qué?

-Olvidalo.

(...)

Okey, dos meses pasaron, su sangre volvió a la normalidad, ahora cada vez que la tengo cerca bebo su sangre.

-Que aburrido.

Me alejé de la ventana y fui a verla, dormía plácidamente, su boca estaba levemente abierta, y roncaba, pero apenas se escuchaba. Sabia que me sentía raro, y creo que tengo claro que es, y esta noche sacaré toda duda.

-Akari.

Le moví el hombro, ella chasquo la lengua y abrió sus ojos.

-¿Subaru? ¿qué haces?-dijo y miró por la ventana-. Es de noche, tengo sueño.

-Tengo que decirte algo, rápido.

-¿No puedes esperar hasta más tarde?

-No.

Suspiró y me miró.

-¿Qué es?

-Me gustas.

Al escuchar eso salir de mi boca sentí calor y ella se cubrió la cabeza con las sábanas.

-Tan de repente.

-Lo siento. Pero es lo que siento.

-Yo...., nunca pensé que sentirías algo así por mi.

(...)

Cada día pasa y más me gusta, ahora me siento bien a su lado, y la verdad...., puedo mostrar mis verdaderos sentimientos. Y eso es lo que haré.

-Subaru, necesito que.... ¿Que haces?

Terminé de desprenderme la camisa y la deja a un lado.

-Tengo calor.

-Si, que gracioso, ya sal, tengo que bañarme.

-Bañemonos juntos.

Me acerque a ella y la empujé levemente hacia el baño.

-¡No! Estas loco.

La besé, y la apegue a mi cuerpo, mientras acariciaba su espalda sobre la tela que poco a poco iba sancando hasta que quedara desnuda por completo, su cuerpo era algo hermoso y su piel al aire hacia que me dieran ganas de beber.

-Toma.-dijo y apartó su pelo dejando el cuello a la vista.

Clavé los colmillos y ella se quejó pero segundo después abrazarme y relajarse.

La llevé hasta la tina y la metí en el agua caliente, me desvestí al separarme y me metí con ella, la besé nuevamente y la acerqué y lentamente entré en ella, después de quejidos algunas lágrimas y rasguños en mi espalda se acostumbro y nuestras caderas se fueron moviendo.

-Subaru..., mas despacio, duele.

-No, pronto te acostumbras...., calculo.

(...)

Seguíamos en el baño y estaba bebiendo de nuevo su sangre.

-Estas mas sediento que de costumbre.

-Lo sé, estas excitada y tu sangre cambia de sabor.

-Te amo....Subaru.

Sonreí sobre su cuello.

-Yo....., yo también.

Me abrazó y largó un suspiro.

En serio, con ella puedo mostrar mis sentimientos.