Capítulo 9: Año nuevo.

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Al día siguiente despertamos renovados. Atrás quedo la tonta discusión y pésimos ánimos.

Salimos a las calles parisinas después del desayuno.

Sin tomar muchas precauciones, caminamos tomados de la mano hasta nuestro primera parada.

El distrito LA ISLA DE LA CIUDAD, el mas antiguo de París.

Cruzamos el río Sena, pasamos un parque y llegamos a nuestro verdadero destino: POINT ZÉRO DES ROUTES DE FRANCE (punto cero de las carreteras de Francia)

Esto estaba escrito en una estrella tallada en el suelo. Este lugar era conocido porque la gente pedía deseos, por ejemplo, volver a la encantadora cuidad de Francia.

-Entonces lo haré.- dijo Luhan. Cerró sus ojos y después de unos segundos volvió abrirlos con una sonrisa en sus labios.

-¿Que pediste?.- Indagué.

-Los deseos no se dicen, Sehun.- cogiendo mis hombros me situó en donde estaba antes él.- Tu turno.

Pensé detenidamente lo que pediría. Podía pedir volver a París ó viajar con Luhan ó que Luhan se sienta como yo ó que Luhan y yo estemos juntos por siempre ó que ese mal presentimiento se quedara en eso ó la salud para todos los que son importantes para mi.

No queriendo escoger, decidí generalizar todo: Quiero que todo en mi vida sea lo mejor.

Abrí muy despacio mis ojos. Mi mirada logra enfocar de inmediato la de Luhan y a pesar de mis verdaderos pensamientos de ayer por la noche, me niego a decir mi conclusión.

Si somos dos desconocidos pretendiendo amar, nos convertiré en conocidos enamorados.

Haré lo que sea con tal de esta vez tener la felicidad para mi. Ya no pensando en el resto sino sólo en mi. Lamento ser egoísta pero he oído que el amor ciega. Quiero estar ciego de amor, solo por Luhan.

¿Pero y él? ¿Lo estará? ¿Estará dispuesto a luchar como yo?

Luhan saca su cámara de fotos y comienza a adentrarse en su mundo. Fotografía el arco, el Sena a lo lejos, el Notre-Dame, el parque, las catedrales...

Mientras yo... Yo lo observo atentamente como el idiota enamorado que soy ahora.

Me encanta cada cosa de él, todo. Desde la pequeña cicatriz en su labio superior hasta su personalidad.

-¿Sehun?.

-¿Si?

-Deberíamos ir a los museos.

-Concuerdo.

Caminamos hasta el museo mas cercano. Las diferentes pinturas son colosales y nos deja tan asombrados que cuando acaba el recorrido decidimos hacerlo otra vez.

*****

El treinta y uno de diciembre del dos mil catorce, el último día del año, decidimos que recibiremos el año nuevo en lo mas alto de la torre Eiffel.

Antes de embarcarnos hasta ahí, paseamos por el barrio latino de París. Hablamos con muchos residentes y para mi agradecimiento nadie sabia quien era.

A Luhan le encanta hablar con extraños, aprender de sus culturas, se emociona demasiado.

-¿Vas a ser periodista?.- interrogo.

-No.- respondió mientras se despedía de un canadiense. Ya eran las cinco, por eso nos encaminamos hacia el hotel.

-¿Guía de turismo?.

-Claro que no.- sonríe.

-¿Entonces?

-Estoy estudiando administración de empresas.- su sonrisa desaparece.- Tengo que continuar con el legado de las empresas de mi familia.

Promesas.(HunHan)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora