[YoonMin] Enséñame a ser como Tú

Capítulo 13

-Me pregunto... si en algún momento pude parecerme a ti...

Murmuró Jimin al aire mientras se encontraba en la azotea de la compañía, sentado contra el alambrado y con la cabeza alzada hacia el cielo gris sobre él, podía sentir como la brisa desarreglaba su cabello y poco a poco secaba el sudor en su cuerpo, sabía que eso no era bueno para su salud, probablemente terminaría resfriado por estar a la intemperie con el frío que estaba haciendo pero aun así aun no quería entrar, a pesar de que después tendría que recibir regaños de Tae, Jin y su manager si en verdad llegaba a enfermarse eso no le importaba, no estaba interesado en su salud sino que en disfrutar de ese momento de soledad, necesitaba ese momento a solas.

Para pensar.

Para recodar.

Y también... quien sabe... quizás para llorar un poco...

-¿Cuánto tiempo tarda en sanar un corazón roto?

Volvió a murmurar y ahora metió su mano al bolsillo de su sudadera, sintiendo lo frío del acero cuando encontró lo que buscaba y sabiendo que sus ojos brillaron un poco más de lo normal cuando alzó el collar frente a ellos, le gustaba mucho ese dije, debía de aceptarlo, pero aun así no podía sentirse feliz de tenerlo, porque aquel dije en forma de nota musical había sido comprado no para él, esa llave de sol era de Suga, representaba a Suga y aun lastimaba un poco a su corazón el haberlo recibido de regreso.

Porque ese regalo era más importante de lo que siempre quiso aceptar.

Porque eso era casi una muestra de sus sentimientos hacia al rapero y el que se lo devolviera casi se sentía como un rechazo para él.

-¿Por qué tuviste que devolvérmelo hyung?

~ DOS DIAS ATRÁS ~

Suga mantenía la mirada fija en el vaso casi vacío frente a él y mientras revolvía con la pajilla el resto de jugo se preguntaba la razón de su permanencia en ese lugar, por qué no había huido como quiso hacerlo apenas vio a JungKook salir de la cafetería, su pierna izquierda tiritaba ante la ansiedad por salir corriendo pero a pesar de todo, a pesar de ese pánico que erizaba su piel...

Seguía ahí...

-¿Qué haré si no viene?

Murmuró en voz baja para luego morder ligeramente su labio inferior, sintiendo como su corazón seguía golpeando con fuerza contra su pecho, estaba asustado, se sentía aterrado porque si esperaba y el menor no llegaba entonces sería herido, se rompería y no quería hacerlo.

No quería romperse...

No otra vez...

-Pero... si me voy... entonces el corazón de Jimin será el roto...

¿Qué dolía más?

Que él tuviera que llorar por esperar en vano...

¿O hacer llorar a Jimin cuando llegue y no lo vea ahí?

Ya había decepcionado a Jimin una vez, ya se había arriesgado una vez a ser odiado por el vocalista y sabía que no podría resistir otra.

Porque sabía que si Jimin llegaba a odiarlo estaría perdido...

Quizás el menor nunca llegue a amarlo, pero odiarlo... no, eso no lo permitiría...

-Sólo treinta minutos más YoonGi... treinta minutos...

Repitió por segunda vez esa tarde, ya había cumplido una hora de espera pero sabía que si el menor decidía ir demoraría por lo menos 2 horas en llegar, a lo menos 1 hora y media si tomaba un taxi desde el departamento. Levantó su mano haciéndole una seña a la camarera que no perdió el tiempo en acercarse a su mesa, sonriéndole con cortesía como dictaba su trabajo.