CAPÍTULO 22

12K 696 212
                                    




Después que salimos de la playa hemos venido a comer a un restaurante muy cercano. La verdad nunca me he sentido tan normal, como una chica de mi edad que tiene una cita con el chico que le gusta. Es lo más cercano a la realidad, de cualquier persona que no se dedique a lo que yo, que he tenido.

Estoy completamente sorprendida con Harry, me está dejando disfrutarlo de una manera que nunca pensé que él mismo quisiera disfrutarla, se le ve muy contento y la rigidez de sus expresiones y su frialdad ha desaparecido, juro que hasta se ve más joven. Inclusive lo he escuchado decir ''gracias'' y sonreír con amabilidad a la señora que está atendiendo nuestra mesa.

Ahora estoy terminando de tomarme el café que pedí después de terminar de comer. Mi teléfono celular no ha dejado de sonar, mis socios no han parado de llamarme pero yo he hecho caso omiso. Sé que si contesto, tan solo una llamada, mi buen humor de ahora cambiará, porque cuando consta de trabajo, solo se refiere a problemas y asuntos que atender, y al menos por hoy, quiero olvidarme que soy la líder de una banda de traficantes de armas, y ser simplemente, la chica de Harry.

—Siento rabia por tener que llevarte de regreso a casa—dice él de repente.

— ¿Por qué dices eso?

—Porque apenas pongas un pie allí sé que todos los temas correspondientes al trabajo te abordarán, y el día tan bonito que hemos tenido llegará a su fin—habla terminándose su café.

—Bueno, en ese caso, ya sabes dónde queda mi oficina. Serás bien recibido—digo con una sonrisa en mis labios e intentando animarlo.

Mi objetivo es cumplido y en el mismo instante que pronuncio esas palabras, Harry sonríe resplandecientemente dejándome ver esos hoyuelos que lo hacen tan irresistible.

¿Me pregunto cuándo será un buen momento para hablarle sobre lo poco que me gusta su actitud cuando estamos delante de otras personas? Es obvio que estoy desesperada por aclarar esto que se está construyendo entre nosotros. Lo amo con todo mí ser, aunque él no lo sepa, y justamente porque mis sentimientos son más fuertes que yo, necesito saber qué es esto para él.

Pero me da miedo sacar el tema, hasta ahora cada vez que lo hago relucir se pone de mal humor y termina diciendo algo que me hiere.

— ¿En qué piensas?—pregunta sacándome de mi ensimismamiento.

—Nada, solo estaba recordando lo bien que me he sentido hoy—me justifico y sonrío para convencerlo aún más.

Harry se me queda mirando, sus ojos me estudian y por unos segundos siento que me está leyendo el pensamiento, que está viendo más allá de mis ojos.

Este día jamás lo olvidaré, es el día más hermoso que alguna vez he tenido, pero no era justo en eso en lo que estaba pensando claro está, pero no puedo evitar no conformarme con lo que me ofrece, lo quiero demasiado y siempre voy a querer más.

— ¿Sabes? Hasta ahora cuando yo recuerdo los momentos felices que he tenido contigo, cuando me doy cuenta, estoy sonriendo como un loco idiota. Dices que estabas pensando en esos recuerdos, pero sin embargo, tenías los ojos caídos, tu boca estaba cerrada en una firme línea y no vi ni una sola señal de felicidad —se detiene unos segundos pero continua hablando — o en realidad estabas pensando en algo más o quizás no te gusta estar conmigo tanto como haz dicho—su expresión es seria y el pecho se me contrae con tan solo pensar que él cree que no disfruto de su compañía.

—No Harry—me apresuro a hablar—claro que disfruto de estar contigo, es la mejor cosa que me ha sucedido—me detengo y me estrujo el cerebro buscando algo que me ayude a no tener que hablar sobre el tema justo ahora, pero no encuentro nada que me sirva, además, Harry no me quita los ojos de encima y sé que me conoce a la perfección, si miento, él lo sabrá, así que, no me queda de otra que hablarle sobre lo que tanto me incomoda y rezar para que este día no termine siendo un infierno—En verdad, estaba pensando en otro tema que me atormenta y he estado deseando hablarlo contigo pero hasta ahora cada vez que lo he intentado solo me ha servido para terminar más confundida de lo que estaba antes.

El GuardaespaldasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora