Juré ante los ojos de la noche que te iba a amar por siempre.
Juré ante tu propia persona, que sería tuya por siempre, pasara lo que pasara.
Siempre es siempre, y siempre será.
Juraste bajo las estrellas que nunca me abandonarías. Que jamás estaría sola.
Juraste bajo la languidez de la luna que nunca se te ocurriría olvidarme, ni por asomo.
Y ahora, ¿la ruptura de todos estos juramentos no conlleva un escarmiento? ¿Vamos a perecer con ésta culpa encima?
O podríamos omitir que hemos fallado, y volver a empezar.
Continuar cumpliendo los juramentos en los que dejamos el corazón aquella noche.
Imaginemos que ese espacio dimensional que se creó entre nosotros jamas existió.
Y volvamos a lo que fuimos.
Volvamos a empezar.
Volvamos a amarnos.
Simplemente volvamos.
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Mil Caras
Random"La moneda tiene más de dos caras". Aquí compartiré con ustedes historias que, de alguna u otra forma, despiertan el corazón. Gracias por leerme. Hacen feliz a esta solitaria alma enamorada de la literatura. Bienvenido.♡ ©Todos los derechos reservad...