Ciento cincuenta días antes:

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Soy lo menos vivo posible.

No encuentro ganas ni siquiera para caminar hasta la estúpida escuela a la que estoy obligada a ir, son exactamente cinco cuadras hasta ella y, sinceramente, no encuentro algo que me motive a ir hasta allí. La mayoría de las chicas de mi edad tienen alguien que les interesa en la escuela: Ya sea mujer u hombre.

Moví mi desganado cuerpo hasta mi asiento delante de todo (obvio) y coloqué mi mochila a mi lado porque no tengo ninguna compañera o compañero (más obvio), miré al profesor y él me sonrió como si fuese mi amigo y sintiera lástima por mí (aún más obvio). Cuando el profesor se volteó una bola de papel me dio en la cabeza seguida de una palabra que ya era común y aburrida -¡Rara! -Gritó uno de mis tan amados compañeros, yo no me voltee y traté de concentrarme en la clase.

Habían pasado solamente cuatro día desde el primer día de clases y ya me habían tachado de rara, pero no los culpo porque puede que sea verdad. El primer día de clases una de las chicas que yo consideraba del grupo de raras vino a hablarme, creo que no la traté como ella esperó y también comenzó a decirme rara. Una rara diciendo rara a otra rara, ¡Qué raro!

Pero creo que ser ignorada por el grupo de raras no es lo peor, lo peor es bajar al recreo y tener que escuchar las mismas palabras de personas que no he visto nunca en mi vida, algunas solo señalan y se ríen mientras yo me pregunto si en esta escuela hay alguna persona con al menos una neurona.

Por eso trato de no bajar al recreo, voy al baño entre horas y como la mayoría de los profesores llegan a tenerme tanta lástima que no les molesta que salga a mitad de su clase para ir al baño a hacer mis necesidades.

Volví a mi casa después de un día entero lleno de insultos, no entendía por qué todavía no me había vuelta del todo y tampoco entendía por qué mis padres no se daban cuenta de nada, de absolutamente, nada. Sé que no pensaban que era la chica más popular de toda la escuela pero seguro pensaban que tenía al menos un puñetero grupo de amigas raras iguales que yo.

Lo que no saben es que hasta el mismo grupo de raras prácticamente me expulsó de su grupo, supongo que superé los niveles de rareza estándar y por eso no quisieron ser mis amigas. Mi únicos amigos son mis útiles y mi tan fiel mochila que me protegió muchas veces de ataques organizados de bolas de papeles.

Tomé mi libreta y empecé a escribir, en realidad nada bueno, sólo me gustaba escribir sobre lo que me pasaba en el día con la mínima esperanza que alguien lea mi diario y me salve del infiero que estoy viviendo, pero no, nunca era así.

Mi querido gato, Aristóteles, se acostó en mi trasero mientras escribía tirada en la cama, él es mi cable a tierra y lo amo más que a todo lo que tengo. Que quede claro que no ése todo no es mucho.

Mi gato lo obtuve al cumplir los quince años de mi tía, supongo que ella tiene pensado para mí el destino que ella tuvo y vivir con muchísimos gatos. Sinceramente no me importaría, me gustan los gatos y no he encontrado a ningún chico que me llame la atención, supongo que el destino de mi tía es mi destino más asegurado hasta ahora.

Por fin es viernes y como es de esperarse no tengo nada que hacer, no tengo redes sociales porque no me gusta y si no tengo amigos es obvio que no tengo novio así que: ¿Por qué no internarme en mi cama a ver series o películas?

Ingresé en mi computadora, encendí el audio y me acosté en mi cama. Mis padres no estaban en casa casi nunca, cuando estaban solían fingir que éramos una familia feliz y sin ningún tipo de problemas, no hablamos de mi hermana y eso me molesta un poco.

Mi hermana ya no vive en casa, mis padres la echaron por tener una orientación sexual diferente a la suya, ¿Se imaginan eso en pleno siglo xxi? ¿Se imaginan lo molesta que me puse con ellos? ¿Se imaginan que a ustedes los dejen en la calle porque les gusta el helado de vainilla? Supongo que no entendieron eso último, siempre vi la orientación sexual como una heladería:

En la heladería había varios sabores y podías probar el de chocolate que sabes que es lo que te guste en este caso (para las mujeres son los hombres y viceversa), pero había muchos sabores y sí querías probar el de vainilla siendo mujer sería anormal. Se trata de gustos, a eso me refiero, no pueden martirizarte porque te guste algo que no elegiste, ¿Se entiende? Me refiero a que en la heladería podrías elegir cualquier sabor de helado pero queda en ti si quieres probarlo o no.

Tuve una pequeña pizca de esperanza cuando me enteré que una de mis compañeras era lesbiana y que mis compañeros y compañeras la aceptaban tal cual como era. No tuve esperanza de ser su amiga pero tuve esperanza que tal vez no son tan cerrados como parecían.

En mi antigua escuela mis compañeros habían aleado a una de mis compañeras por ser lesbiana, ella no era mi amiga tampoco allí pero era con quien quedaba en clases de gimnasia porque éramos las únicas sin equipo. Supongo que hablábamos solo por compromiso, a mí me agradaba ella pero yo no a ella.

Volviendo a mi hermana, yo siempre supe que ella lo era porque no la veía feliz con los novios que tenía, no la veía completa y tampoco enamorada así que supuse que había algo que no la dejaba mostrarse del todo como ella era. Yo la acepté y se podría decir que es la única amiga que tengo en todo el mundo, pero no puedo ir a vivir con ella porque: 1) Vive con su novia y 2) Todavía dependo de mis padres y a ellos no les gusta mucho la idea de que siga hablando con mi hermana, piensan que voy a "contagiarme".

¿Cómo podría contagiarme? Creo que odio a mis padres por pensar como lo hacen, espero algún día poder cambiar su forma de pensar y que mi hermana pueda venir todas las veces que quiera. No me gusta tener que esperar un mes para verla, me agrada estar con ella y no es una mala persona como mis padres piensan. Mis padres no son excelentes padres pero no son malas personas solo... Han tenido que vivir épocas en las que se decía que llorar no era de hombres como si los hombres no fueran personas, como si los hombres no sintieran.

No podrás ayudarmeWhere stories live. Discover now