Capítulo 5

130 13 0
                                    

Como Marc había dicho la noche anterior me prepare para salir como Michael R. Parker mientras él iba por Lirio al estudio.

Estábamos decididos a ir y entregarle Lirio a la mafia rusa a cabio de mi hermano y su amigo ya que de lo contario no quería ni imaginarme lo que les harían.

―¿Estas segura de esto? ―pregunta Marc mientras conduce a donde le he indicado.

―Es mi hermano ―comento hojeando el libro que entregaremos.

Pocos minutos despues llegamos al lugar de encuentro a solo unos pocos metros de la casa en la que había estado, algunos de los empleados de la mafia rusa se encontraban impidiéndonos llegar más lejos con el auto asi que Marc estaciono a un lado cerca de unos árboles. Bajamos del auto con Lirio dentro de una bolsa.

―No pueden pasar ―menciona alzando la voz uno de ellos y apuntándonos con sus armas.

―Tengo un asunto con tu jefe, Evan ―digo con el mismo tono de voz que él.

―Le avisare que has llegado, pero no pueden moverse de ahí ―contesta y nos quedamos en donde estábamos. No tenía pensando hacerlos enojar.

―¿Segura? ―pregunta Marc.

―Ya te he dicho que... ―guarde silencio y centre mi mirada en el bosque donde había escuchado algunos pasos y visto moverse a algo o alguien en todo caso.

―¿Qué? ―cuestiona Marc y lo silencio levantando la mano.

―Hay alguien entre los árboles ―anuncio con voz baja para que solo él pueda escucharme.

―MI6... ―suelta de un momento a otro.

―¿Cómo se enteraron?

―No lo sé.

Me quedo mirando a un lugar fijo entre los árboles, hasta que logro ver a Mayer no tan lejos de nosotros.

―Parker ―dice caminando hasta nosotros con pasos firmes―. ¿Qué rayos hacen aquí? ―pregunta con voz amenazante.

―Michael ―habla Evan a nuestras espaldas, volteo sin quitar la atención de Mayer y los árboles, donde seguramente habría más agentes escondidos―. Que bien que saber ser puntual ―comenta caminando hacia nosotros con dos tipos siguiéndolos que traen empujando a mi hermano y su amigo.

―Se parece a ti ―comenta Marc en un susurro.

―Se parece a mi padre ―respondo sabiendo a que se refiere.

―Andersen, Parker entreguen Lirio. Ahora ―dice Mayer acercándose, haciendo que saquemos nuestras armas y lo apuntemos.

Nos alejamos a una distancia prudente del bosque quedando a mitad de la calle con Evan mirándonos de frente y Mayer a un lado.

―Vamos, Michael tu hermano y su amigo te esperan ―comenta Evan mirándonos con una gran sonrisa―. Entrega Lirio y los dejaremos ir sin ningún rasguño ―dice recalcando cada una de las palabras.

―Andersen, Parker ¿Qué creen que están haciendo? ―grita Mayer acercándose a nosotros mientras que Marx le apunta con el arma a la cabeza―. Entréguenme Lirio, ahora.

―¿Y por qué debería de hacerlo? ―pregunto mirando a Marc quien tiene Lirio en una bolsa.

―Parker eres un agente ¿Qué diría tu padre?

Suspiro, estaba a punto de pedirle a Marc Lirio u entregarlo a la mafia rusa, para terminar con esto de una vez por todas.

Me aleje de ellos apuntando a los árboles, nunca había estado en alguna situación parecida. Vi como Mayer sacaba un arma y susurraba algo que no logre escuchar, pronto pude ver agentes con armas desde todos los ángulos, algunos escondidos y otros a la vista de todos, estábamos rodeados.

LirioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora