LET'S GET WOOHOO!!•{Bokuto X Kuroo} YAOI/GAY© || PAUSADA ||

Capítulo 4.

NARRA BOKUTO

Después de darme una merecida ducha, con una sonrisa de oreja a oreja en mi rostro, abrí la puerta de mi respectiva habitación, dentro Kenma y Hinata jugaban a un videojuego de los suyos.

-Hey, hey...-les saludé alzando mi mano, mientras pasaba de largo para llegar a mi cama.

-¡Señor Bokuto, ha estado impresionante rematando!-Hinata se puso en pie y me miró con los ojos llenos de un brillo intenso.

-¡Renacuajo no me llames así que me haces llorar!- secando mis lágrimas cogí a Hinata entre mis brazos para abrazarle.

-¡Usted es genial, Bokuto!- insistió.

-¡No sigas! ¡No sigas!- le supliqué aspirando mis mocos y secando mis ojos.

Jo... Era tan amable el renacuajo este, me encantaba como me elogiaba de esa manera, hacía que me sintiese más grande de lo que era. Bueno, era uno de los mejores de todo Japón. Sí, digamos que era el mejor.

Sonreí bobamente mientras miraba a Shouyou con los ojos aún mojados por el llanto.

-Mañana te enseñaré a hacer una finta, ¿vale?- le dije para compensar lo bien que me había hecho sentir.

-¡Muchas gracias Bokuto-sama!- Shouyou dio saltos de alegría frente a Kenma, que este siguió sin levantar la mirada de la máquina infernal.

-¡Oh!-note como una flecha se clavaba en mi corazón y lo partía en dos. Me acababa de llamar Bokuto-sama, Bokuto-sama... ¡Me hacía referencia como un Dios!

Y de nuevo, ante el renacuajo mis lágrimas volvieron a salir disparadas de entre mis ojos, cual si fuese un aspersor.

Después de unos minutos haciendo drama para que se me pasase el dolor que Shouyou había incitado en lo más profundo de mi, volví la vista hacía Kenma, el cuál por nada del mundo levantaba la mirada de esa máquina. Por mucho que ahora mismo hubiese una masacre zombie y frente a sus narices me comiese a su amigo, no levantaría los ojos de esa dichosa maquinilla.

Ciertamente no se que le veían los niños a esos cacharros... El voley era mejor, me lo pasaba más bien que estar sentado viendo a un muñequito moviéndose. Aunque la curiosidad me picaba y quería saber a qué estaba jugando. Me acerqué por detrás al gato, viendo como movía a un pequeño personaje.

-Oye, ¿a qué estas jugando?- pregunté curioso abriendo los ojos como platos y poniendo morritos. Ese juego yo no lo conocía.

-Se llama Yo-kai Watch, es un juego que acaban de sacar, ¿a qué mola?- contestó Pulgarcito señalando a la pantalla.

-Es un juego muy estúpido, ya me lo he pasado tres veces desde que llegamos aquí -contestó Kenma como si eso fuese normal.

-¿Cómo que estúpido Kenma? A mi me daría miedo si me apareciese un Yo-kai...-se confesó Hinata temblando sólo de imaginarlo.

-Los juegos que verdaderamente molan, son los de guerras y matanzas- los ojos fríos de Kenma continuaron clavados sobre la pantalla. ¿En que demonios pensaba ese crío tan sádico? Me daba miedo... ¡¿Por qué las amistades de Kuroo eran tan raras?!

-A ver, trae aquí -arrebate la consola de sus garras de gato-. ¿Qué tengo que hacer?

-Atrapar Yo-kai- contestó Hinata con una sonrisa ilusa.

-Bien...- empecé a tocar a las letras que habían, me movía por la calle y seguía las instrucciones que me daban. La verdad es que a medida que la partida transcurría me había ido enganchando más hasta tener que pasarme el juego.