Dos meses y una búsqueda nula.

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Acaricie mi vientre y una lágrima calló por mi mejilla.

-¿Vas a seguir llorando por ella? ¿Después de todo lo que te hizo?

-No entiendes mi forma de pensar y lo acepto, pero deja de recriminarme cada vez que me ves así.

-Es solo... ésta situación me pone los pelos de punta.

-La mayoría de ellos estaban muertos, todos nosotros estamos bien, ¿Qué te pone de punta?

-No encontraron el cuerpo de Lara y uno escapó.

-¿No escuchas nunca a los médicos o policías? A juzgar por la cantidad que había de sangre suya, no pudo haber sobrevivido.- Más lágrimas cayeron de mi rostro al pronunciar la última frase.

-¿Y el que escapó a ti no te preocupa?

-Si, pero es uno. Prefiero disfrutar este momento, ya que no se repetirá.

-¿No vamos a tener mas bebés?- Dijo acercándome suavemente a él.

-¡Claro que sí! Pero cada embarazo, cada momento es único.

Le sonreí y el secó mis lágrimas.

-¿Vamos a comprar una cuna?

Asentí.

-No sabes todo el bien que me haces.

-No sabes lo feliz que me pone escuchar eso.

Ahora teníamos el apartamento de la familia de Jayson.

Amanda y Eric nos lo habían regalado, como primer regalo para nuestra pequeña familia.

-Mmm, me gusta esa cuna rosa.

-¿Y si es niño?

-Pues tendrá una cuna afeminada.- Se encogió de hombros.

-¡De ningún modo! Busca colores neutros, que sirva para lo que sea que vaya a ser.

-¿Y si es un alienígena?

-Entonces significa que el bebé es de mi novio de Marte.

-¿Tienes un novio en Marte? ¡Yo una en Jupiter! ¿Y si hacemos una cita en pareja?

-No lo sé, no creo que le caiga bien que salga también con un humano.

-Recorcholis.- Arrugó su nariz.

-Eres tan lindo cuando haces eso que me asusta.

-Y tú, tu eres linda en todo momento.

Plantó un dulce y corto beso sobre mis labios.

-No

-¿No qué?- Preguntó confundido.

-No quería un beso corto, quería uno largo.

-¿Cómo?

-Así.

Lo tomé por el cuello de su camisa y junte nuestros labios, tan apasionadamente como había querido hacia mucho tiempo.

-¿Y si te digo que vi la cuna perfecta?

Me giré y miré en la dirección en la cual miraba el.

-Es hermosa, pero es celeste.

-¡El celeste es un color unisex!

-Si así lo piensas entonces sí, es perfecta.

-Entonces compramos esto y ¿vamos a ver ropa unisex?

Asentí.

-Pero te sugiero que me cuides, las embarazadas de todas las edades no han dejado de admirar mi belleza, enamoro hasta a las abuelas.

Only You. #VCEP2Where stories live. Discover now