(no me resistí con el gif lo siento)
Harry's POV
"S-sí, sí me gusta alguien," apenas las palabras salieron de su boca, sentí mi corazón oprimirse. Bajé la cabeza aunque deseaba no haberlo hecho.
Siempre había sido fuerte, feliz sin importar lo que ocurriera, sin importarme lo que los demás piensen y libre por ser quien soy. Intentaba no demostrar desconfianza en mí mismo y buscaba siempre lo bueno en lo malo, de alguna manera siempre funcionó.
Pero Louis había cambiado eso, no en su totalidad, sin embargo. Él me hacía sentir débil, cada vez que estaba con él, medía mis movimientos, temeroso de que estuviera haciendo algo mal. Siempre dije lo que pensaba y actuaba de forma impulsiva; pero con él no podía evitar pensar dos veces antes de hablar, porque siempre fui abierto y descuidado y sabía que en algún momento podía decir algo inadecuado.
Era de esperarse que le gustara alguien, y de seguro esa persona gustaba de él también. Pero nadie jamás lo querrá de la manera que yo lo hago.
"Oh." Forcé.
Lo miré a sus ojos, preciosos y él no lo sabía. Me encantaba todo de él, desde su personalidad sarcástica pero a la vez simpática, sus ceños fruncidos que formaba sin darse cuenta que últimamente se formaron en sonrisas que me hacían feliz, feliz porque sabía que él ya no estaba tan triste como cuando llegó. Me gustaba que ya no esté tan frustrado consigo mismo aunque sabía que seguía sin estar completamente a gusto; me encantaba el sonido de su risa, su preciosa sonrisa que formaba arruguitas a los costados de sus ojos cuando era genuina, sus pestañas largas, sus pómulos finamente marcados... su cuerpo, delicado pero a la vez masculino, era hermoso. E imposible.
Quien sea que tuviera el privilegio de llamarse su novio era un maldito afortunado, por eso debía preguntar. "¿Quién es?"
Él pareció sorprendido por la pregunta y en sus ojos vi lo que parecía ser afecto, casi causó que me ruborizara, pero yo no era así.
"¿No lo sabes, cierto?" dijo con una pequeñísima sonrisa, su temple suave. Y cómo diablos se atrevía a preguntar eso, era obvio que no lo sabía y me mataba preguntárselo, pero sentía la necesidad de saberlo aunque doliera.
Negué con la cabeza. Me sentía desprotegido, eran cosas nuevas, no sentir que me encontraba en mi zona de confort. A pesar de eso, Louis me hacía sentir bien, dejando de lado todo lo que causaba en mí, me hacía sentir en casa. Cuando lo abrazaba, tan sólo encajabamos. Como si mis brazos hubieran estado hechos para sostenerlo.
"Tú." Susurró, su mirada seguía siendo la misma.
Juro que mi corazón paró por unos segundos, sentía que iba a desmayarme en cualquier momento, mi mente estaba divagando y yo no podía formular palabras.
Sólo pude dejar un "¿Eh?" que seguro me había dejado como un idiota pero qué más da.
"Me gustas tú, gran imbécil." rió, sonrisa completa ahora.
"Oh." Balbucee y quise golpearme por ser tan estúpido.
Él se incorporó desde donde estaba sentado frente a mí, se acercó más hasta quedar a horcajadas, sus rodillas a ambos lados y sus manos en mi rostro. Mi mente estaba nublada en LouisLouisLouis pero manejé en sostenerlo de la cintura rápidamente. Su rostro estaba a meros centímetros del mío y aunque mantenía mi respiración estabilizada, mi corazón latía a una velocidad exagerada, al igual que el suyo, que podía sentirlo al estar tan cerca. Acaricie con cuidado su costado, levantando levemente el ruedo de su camiseta para sentir la piel suave de sus caderas. Él esbozó una sonrisa pequeña y yo no sabía si imitaba la mía ya que estaba completamente hipnotizado viéndolo.
"También me gustas Lou, demasiado..." Susurré cerrando mis ojos pero abriéndolos casi al instante al no querer perderme su rostro, ni ahora ni nunca.
Sonrió amplio y sus pulgares rozaron con delicadeza los costados de mi rostro, era tan suave y delicado, algo a lo que no estaba acostumbrado pero de cualquier manera me hizo sonreír y sentir un calor expandirse en mi pecho. Sus ojos brillando eran todo lo que necesitaba, podía ver genuina felicidad en ellos y su risita llenaba mis oídos, era un Louis completamente distinto al que vi por primera vez, aunque sabía que era éste era él en realidad, solo que nunca había sido feliz en realidad. Y el hecho de que lo esté ahora mismo, conmigo, me hacía a mí feliz.
"Ahora besame, tonto." le dije antes de atraerlo y tomar sus labios como había estado esperando.
Lo abracé incluso más cerca y él llevó una de sus manos a mi cabello, lamí su labio inferior pidiendo permiso que él me otorgó al abrir su boca y dejar que nuestras lenguas se junten. Tiró de mi cabello causando que yo emitiera un sonido de aprobación, una de mis manos subió por su espalda, recorriendo y aventurando mis dedos por sus costillas hasta llegar a su cuello y tomarlo de atrás, por su nuca, haciendo el beso más fogoso. Mordi su labio accidentalmente pero no pareció molestarle, en lo absoluto, gimió despacio y agarró mi cabello con fiereza pero con cuidado.
"Haz eso otra vez," dijo sin aliento, separándose apenas para hablar aun con sus labios rozando los míos. Asentí rápido, ansiando besarlo otra vez.
Esta vez ambas de sus manos fueron a mi cabeza, enterrando sus dedos en mi cabello. Dejé que mis manos vayan más abajo de su espalda, a su trasero, atrayéndolo más cerca y más fuerte. Él hizo un sonido satisfecho cuando lo apreté y tomó todo de mí no mover mis caderas contra él. Separé mis labios apenas para repartir besos por su mandíbula hasta llegar a su cuello, besando con más fuerza, succionando la piel suave hasta lograr una linda marca que no se iría en unos días, el estiró el cuello para darme mas acceso y se quejó cuando terminé mi obra, pase mi lengua encima para suavizarla y besé la marca rápidamente antes de volver a él. Subí mis manos hasta su cadera y él llevó una hasta mi mejilla, sintiendo con su pulgar la manera en las que nuestros labios se juntaban, ésta vez más suave y lento.
Nos separamos luego de un rato, el aire siendo necesario, ambos casi sin aliento, sonriendo como tontos, sintiendo una verdadera felicidad, por estar en los brazos del otro.
"Sabes que tenemos que hablar de esto, ¿no?"
"Lo sé."
Pero antes, necesitaba asegurarme de que estaba aquí, porque ahora mismo, lo único que necesitaba era tenerlo conmigo.
...
*sonríe incómodamente*
hai
-s.
