Cuidando del pequeño Kook [Primera Temporada SuKook]

Conocidos

—¡Ahhh, Yoon Gi, SOCORRO!

Ji Min corrió a toda velocidad hasta el peli menta y se tiró encima de él al estilo Scooby Doo. Y Yoon Gi tuvo que agarrarlo porque aquel perro parecía muy empeñado en querer arrancarle los pantalones.

—¡Aléjate Satán! —chilló Ji Min en los brazos de Yoon Gi.

—Ji Min... Es un cachorrito—.murmuró mientras que intentaba soltarlo porque ya estaba cansándose de sostenerlo.

—Pero...¡Quiere morderme!

Jung Kook rodó sus ojos, irritado por la voz chillona del peli naranja. Creía que era todo teatro sólo para llamar la atención de su cuidador.

Ji Min lloriqueó un poco más sobre los brazos de Yoon Gi. Hasta que Kook se acercó al perro y éste corrió hacia él.

Kook lo acarició y el animal pareció calmarse. Movió su cola contento y le ladró como si lo estuviese saludando. Lamió su cara y el pequeño empezó a reírse. Lo hizo de la manera más tierna posible y Yoon Gi se quedó pasmado mirando aquellos dientecitos de conejo que se asomaban por su boca.

Soltó a Ji Min de inmediato y éste cayó de culo al suelo. Pero debido a sus grandes nalgas, pudo amortiguar el golpe.

—Auu...—se quejó al incorporarse.

Mientras que Kook estaba encariñado con el perro y Yoon Gi embobado como un padre observando a su pequeño, un joven de cabello rubio con una gorra negra se acercó corriendo torpemente hasta ellos, casi dándose un porrazo.

Llevaba los cordones de sus convers rojas desatadas, por lo que en cualquier momento podía caerse de cara contra el asfalto.

—¡Lo siento!—dijo agitado, al llegar al lado de Ji Min y Yoon Gi—¿Está todo bien?

—¿Eres el dueño del perro?—preguntó Yoon Gi, observando al animal porque le resultaba conocido.

—No. Se lo cuido a un amigo, pero se me escapó —rió apenado—Lo siento si te causó algún problema.

Ji Min se acercó hasta el tipo y se cruzó de brazos, molesto porque se disculpaba con el otro y no con él.

—¿Excuseme?—dijo con una sonrisa irónica—Pero ese perro al que cuidas me persiguió para morderme... Deberías tener más cuidado.

El chico rubio lo miró y le asintió con la cabeza.

—Lo siento. Nunca quiso morder a nadie, es muy raro.

—¿Eso qué significa? —frunció el ceño Ji Min.

—Que eres especial—rió el rubio. Pero Ji Min no comprendió.

La vista de todos se quedó observando al pequeño por un buen rato. Se veía muy entretenido jugando con el pequeño peludito. Lo hizo correr alrededor de los tres y éstos, a excepción de Ji Min sonrieron.

—Pero...—dijo el rubio mirando más detenidamente al niño, hasta que se puso en frente de él y lo interceptó —¿Kookie?

Jung Kook asintió y le sonrió. Lo conocía, era amigo de su hermano. Siempre les cuidaba el perro.

—¿Se conocen? —preguntó Yoon Gi curioso.

—Sí. Soy amigo de Seok Jin. Me llamo Nam Joon—le dijo el rubio a Yoon Gi y luego miró a Kook—¿Y quiénes son...?

Jung Kook se acercó al oído del muchacho para susurrarle y Yoon Gi se quedó  bastante sorprendido porque le estaba hablando.

Nam Joon asintió con su cabeza serio y se volteó a mirar a Yoon Gi. Se acercó hasta él y estrechó su mano.

—Encantado, ¿cómo te llamas?

—Yoon Gi. Igualmente —le estrechó su mano.

A todo esto, Ji Min se había quedado un poco al margen de toda la presentación absurda.

—Emm... Hola, yo estoy aquí también —dijo Ji Min alzando su mano.

—Ah... Lo siento, Kookie no me dijo nada de tí. Pensé que estabas de paso.

Jung Kook se hizo el que no había escuchado nada e ignoró la mirada de odio de Ji Min. Corrió con la mascota de su hermano hasta Nam Joon y se pusieron a dar vueltas alrededor de él nuevamente.

Yoon Gi estaba sumido en una nube de ternura. Observar así a Jung Kook por algún motivo lo hacía sonreír. Pero cuando Ji Min lo observó desde la distancia, bajó la mirada.