4.- Luna

805 68 5
                                    

Serena

Un estruendoso sonido me hizo levantar precipidamente, gire la cabeza a todos lados en busca de algo inexistente, el pánico y el miedo aun estaba en mi, tomé una bocanada de aire, mis pulmones me los agradecieron, cerré los ojos aliviada y me abracé a mi misma.
Me iba a incorporar para poder ir a tomar un poco de agua, además quería caminar un poco, me sentía demaciado inquieta, pero un sonido dentro de mi armario, me congeló. El sonido se fue haciendo mas insistente. ¡Vamos, Serena! ¡No es hora de ser una cobarde!
-¡Pero tengo miedo!- susurre

Me incorpore y camine lentamente hacía el armario, la luz de la Luna alumbraba tenuamente mi habitación. ¡estúpidas, estúpidas películas de terror que pasaban en mi mente en estos momentos! Toma un cepillos de mi Peinador. ¡Como si un cepillo fuera ayudarme! Metí mi lado negativo a la bodega de mi cabeza, no necesitaba más de eso en estos momentos.

Camine unos pasos más y puse la mano en el pomo, 1...2....3.... y lo jale, levante el cepillo en el aire y espere lo que sea que estuviera adentró. Mi corazon latio con fuerza, visualice entre la ropa y oscuridad, unos brillantes ojos me vieron desde adentro, ahogue un grito. ¡Era un gato!
Ha esta paso moriría de un paro cardíaco, suspiro.

-Hola, gatito...-murmure -¿Que haces aquí?- tome al gato y lo cargue entre mis brazos. Era negro y una media Luna estaba en su frente, era demaciado extraño ¿Se puede tatuar a los gatos? ¡Que estupida, Serena! Hasta pensarlo era tonto.
Lamio mi brazo haciendome cosquillas, sonreí. Camine otra vez hasta mi cama con el gato entre los brazos y vi la hora, Las 4:00 am. ¡tan temprano! Baje al gato en la cama y me recoste, el miedo regresó a mi, no quería volver a tener una pesadilla como esa, me causaba pánico tan sólo pensarlo.

Cerre los ojos vencida por el sueño, la oscuridad se volvió apoderar de mi.
🌼🌼🌼🌼🌼🌼
Darien

Lo ocurrido ayer me perturbaba, también me precupaba que mi primera reacción fuera abrazar a esa chica que apenas conozco....Serena.... Me niego a seguir pensando en ella, pero su recuerdo es insistente.
Parece una virus. Un virus que me hace sentir jodidamente bien.

-¡Darien! ¡Estas ahí! ¡Darieeen!- andrew movia su mano frente a mi y gritaba en mi oído.

-¿Que te pasa, andrew?- dije aturdido

-Ni siquiera me estas poniendo atención.- me sacó la lengua y fingió estar enojado. Sonreí.

-Claro que si... hablabas de como quisieras despertar y haber terminado el colegio ¿no?- la verdad es que no sabía de que hablaba pero decidí dejarlo a la suerte. El solto una carcajada, acerté.

-Bueno... te has salvado, te iba a obligar a pagar todo esto.- señaló la comida frente a nosotros, Ni siquiera me había dado cuenta de ello.
Andrew y yo siempre veniamos a comer a esta cafetería, tenía unos grandes ventanales, mesas de madera y sillas a juego, estaba pintada de colores pasteles y solía tener muy buenos postres.
El cabello rubio de Serena revolotio cuando entro al local llamando mi atención.
¿Por que siempre aparecía cuando creía haber dejado de pensar en ella?
Le sonrió al cajero y hablo un rato con el, no podia dejar de mirarla, así que observe cada uno de sus movimientos. Asintió sonriendo. Cada vez que sonreír se iluminaba, iluminaba a todos a su alrededor. ¿Como podía hacer tal cosa?
Me gustaría saber de que hablaban... sentí una punzada en el estómago.
Volvió asentir y salió del local.
No pude evitar levantarme y seguirle, le murmure un adiós, me tengo que ir a andrew y salí rápidamente.

Serena estaba pegando un cartel en una de las paredes de la cafetería, me acerqué y pude leer un poco "¿Es tuyo este gato?". Le toque el hombro y ella se sobresalto tirando los demás carteles, se agachó para recogerlos al mismo tiempo que yo y nuestras cabezas chocaron, la tenía tan cerca, nos quedamos por unos interminables segundos mirandonos a los ojos, tenía unos ojos azules como el cielo, eran demaciado bonitos.

-Tonto...- murmuró y se alejó de mi, empezamos a recoger los carteles.

-¿Pegarás tu sola todo esto, cabeza de chorlito?

-claro...¿Quien más?- me miro malhumurada. Sostuvo todos entre sus brazos y se levantó. - No, puedes ir asustando a las personas así, casi me provocas un paro cardíaco... que grosero. - solte una carcajada, ella camino y le volví a seguir.

-¿Seguirás siguiendome todo el día?

-No tengo nada más que hacer.- sonreí, meti las manos en mis bolsillos despreocupadamente, Serena suspiro y siguió caminando sin inmutarse.

Se rindió fácilmente y la seguí por todas las calles pegando los carteles, Serena era demaciado divertida...demaciado cálida, cada vez que la veía sonreír mi corazon latia acelerado.

-¿Te ayudo?- tome el cartel y lo pegué en una pared rápidamente, ella me sonrió por primera vez y me inundó la felicidad.

Por la tarde cuando habíamos acabado, nos sentamos en una banca, ella hablaba de como un gato la había asustado en la noche y yo divertido la escuchaba. Cuando fue tiempo de irnos la acompañe a su casa.

-Gracias...digo..por lo de hoy.- sonreí y ella se sonrojo. -No eres tan desagradable después de todo.- dijo y se fue. ¿Como se atrevía a irse después de decirme eso?

-¡Serena!- grite y ella volvio la cabeza y me miro. -¡Tu tampoco no eres tan desagradable!- volví a gritar, sonrio, pero su sonrisa se desvanecio de inmediato. ella corrió hacia mi con la preocupación en sus ojos. ¿Dije algo mal? Me empujo y pude sentir el golpe de algo en el suelo justo donde estaba antes ¿Que fue eso?
La caja de madera que debió haberse roto por el impacto pemanecio intacta frente a nosotros.
Serena estaba sobre mi, pude sentir su respiracion agitada y su corazón acelerado, agradecí el contacto, la toma de la cintura, asegurando que estaba bien y ella se levantó.

La caja se empezó a romper, la miramos atonitsos. De ahí salió algo que efectivamente no era humano ¿Que por que lo sabía? ¿Acaso los humanos parecen sombras?

Sonrisa Lunar (Darien Y Serena) EDITANDOWaar verhalen tot leven komen. Ontdek het nu