Capítulo 25

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~Capítulo 25~

Esas palabras fue como una flecha directo al pecho, o mucho peor. Sus palabras fueron muy hirientes y ahora lo único que quiero y tengo que hacer es proteger a mi hermano, solamente eso me importa. Es evidente que jamás podré contar con mi padre y ahora me mantendré lo más alejado de el junto con mi hermano.

-lo siento, no es lo que quería decir- dice mi padre arrepentido

-pero lo dijiste- respondo

Miro a mi hermano y esta llorando pero de manera controlada, esto le afecta mucho más a el que a mi. Pero de ninguna forma se quedo callado.

-sabes- dijo Jackson con la voz muy sensible- hubiera preferido tener a mama.

Mi padre se sentía muy culpable, ¡pero lo es!. Jackson nunca llora es tan reservado guardando sus sentimientos y temo que haga alguna tontería.

-no escúchenme, lo lamento, son lo mas importante que tengo- dice mi padre con lagrimas en los ojos.

El se acerco a abrazar a Jackson pero estoy tan enojado y lleno de rabia que lo empuje lo más lejos de el.

-¡déjalo! No quiero que te nos acerques y mucho menos a el, ¡oíste!- grite

-hijos perdónenme por favor, ya saben como soy cuando me enojo, pueden...

-¡basta! Eres la persona que nos ha hecho más daño- digo y el se sorprende

Hada y Conejo guardaron silencio. Jackson estaba llorando pero de verdad, parece no importarle que lo vean así, se esta desahogando mientras yo solamente suelto lagrimas silenciosas.

-los amo, no quiero perderlos- dice llorando no muy fuerte

Lo miro con decepción y por medio de mis ojos puedo transmitirle el odio que estoy empezando a desarrollar.

-pues ya lo hiciste- digo como punto final y tomo del brazo de Jackson pero el se zafa bruscamente.

-déjame, quiero estar solo- dice y se va volando rápidamente que no logre alcanzarlo.

Me alejo lo mas que puedo del polo y busco a Jackson en todos los lugares posibles pero pienso que no es tonto, no creo que quiera suicidarse. Me rindo y voy a la casa de Rapunzel. Cuando me abre me mira sorprendida.

-¿que pasa?, ¿estas bien?- dice algo preocupada

La miro con lagrimas y ella extiende sus brazos, rápidamente corro hacia ellos. Me abraza y me desahogo lo más que puedo, ella solamente acaricia mi cabello para tranquilizarme. Mis lagrimas mojan su brazo y cuando noto que ya me desahogue lo suficiente, levanto mi rostro y ella me mira a los ojos.

-¿mucho mejor?- pregunta secándome las lagrimas con su pulgar. Asiento y le sonrío y ella se me queda viendo mientras sigue acariciando mi mejilla.

-¿Rapunzel?

-¿si?

-últimamente he tenido la necesidad de querer protegerte, le he dado mil vueltas al tema y he llegado a una conclusión- digo y tomo un mechón de su cabello y lo llevo detrás de su oreja- me gustas

-es extraño...yo siento lo mismo- dice y me sonríe

Estábamos los dos solos, ayer llovió y la gente parece estar todavía refugiada. Rapunzel me dijo que Merida había ido a cazar pero esta tan preocupada por ella que esta esperando a que llegue.

-ya debería haber llegado- dice ella asomándose

No respondo nada, ya que sea lo que le diga no haré que este mas tranquila. Salimos de la casa y nos quedamos ahí afuera esperando que llegue la pelirroja. La tierra todavía está húmeda por el agua. Estamos tan pendientes del bosque que de pronto vemos que la gente corre metiendose en el bosque, algo pasa.

No hay espacio para los dos Donde viven las historias. Descúbrelo ahora