En el Principio.

Capítulo VI.

Todos cruzaron por la puerta al quinto circulo.Esta se abrio dándoles lugar a un sitio parecido al anterior pero sin el lago ardiente.En su lugar había una enorme plataforma de piedra cuadrada,y en ella se veían multitud de juegos de cuatro pares de pequeñas argollas rotas,con una mas grande sobre ellas.Todas vacías,salvos algunas que tenían algún brazo o pierna cadavérica,de algún anterior dueño.

Detrás de este lugar estaban ellos,los rebeldes,que habían logrado liberarse del aprisionamiento de pies,manos y cráneos, y a sí mismo liberado a otros al parecer en un cambio demoníaco de guardia.Estos los  miraban a ellos,a los arcangeles y angeles, con expresión decidida y fiera.

Eran muchos más de los que Miguel imagino y esto le pesó un poco,pensando en los novatos y en Luzbell...Quizás no fue una buena decisión de su parte haberlos traído.

Si algo les sucedía por su culpa,no se lo podría perdonar jamás.

Levantó su voz,y comenzó a dar órdenes en tono imperativo.

-Hariel,Yasiel, Lumiel,por la izquierda...Abdi-xtiel,Graciel,Gabriel,Rafael  a la derecha...Uriel,Abadón,Qirel,Baraquiel,conmigo al centro...Luzbell,Pilly-kabiel y Finniel detrás nuestro-.

Cada uno se acomodó en su lugar según su disposición estratégica y la batalla comenzó.

El lado izquierdo derribaba y sometía a los rebeldes con una arrolladora destreza...así lo previó Miguel pues eran más los de ese flanco.El centro avanzaba con firmeza subyugando a los deteriorados, aunque aún fuertes adversarios.Pero la izquierda estaba teniendo sus problemas,Graciel era rápido y Rafael era certero,pero Gabriel,era Gabriel, y aunque era uno de sus mejores guerreros ,lograr que guerree era el problema.

-Miguel no sería mejor hacer el intento de dialogar con ellos-le decía levantando la voz,mientras solo se defendía de los ataques enemigos.

-Ellos ya pasaron ese punto Gabriel...Somételos...No vinimos a conversar, ni a hacer amigos-le respondio él, rogando al Padre por un poco de paciencia.

-Pero...Quizás tengan sus razones...tal vez deberíamos oír sus reclamos-insistió el otro ángel haciendo que Miguel lo mirara con un poco de desespero.

-¡Haz lo que te mando Gabriel!...¡Por todos los cielos!-le contestó nuevamente, y ya exasperado.

Gabriel era de carácter dulce,y pacífico al extremo,uno que se complicaba en situaciones como esa.

Detrás del arcángel de cabellos cobres vio a Graciel que lo miraba con una pregunta bastante obvia.

No apoyaba sus métodos...Pero situaciones desesperadas requieren medidas desesperadas,teniendo esto en mente asintió a su silenciosa propuesta.

Con el sigilo típico que tenía,Graciel se puso detrás de Gabriel y le tiró del cabello,cabe decir que lo hizo muy fuerte.

El aludido grito y se volteo a ver a su agresor,pero no encontró a nadie, el pequeño rubio era sumamente veloz.

-¿Como se atreven a hacerle eso a mi amigo?-masculló Graciel a sus enemigos alrededor.

Y Gabriel se activó.Nadie tocaba su largo cabello cobrizo.

El pequeño arcangel le hizo un gesto de picardía a Miguel seguido de una risita, y él sonrió en respuesta pues sabía que ahora nada detendría al airado angel.

La contienda continuó,mientras Miguel intentaba que nadie se acercara a Luzbell,pero con Pilly-kabiel había descansado, pues Finniel se había abocado a protegerla,y lo hacia muy bien,aunque la joven tambien lanzaba golpes muy agiles en cuanto tenía la oportunidad de hacerlo.