-OO3.

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Había llegado la noche en el primer santuario, ayudaba a Gladio a instalar la carpa en donde yo dormiría, ya que según Ignis no estaba bien que durmiera con ellos.

Sentí un flash en mi cara.

—¡Hey!—Reclamé por mi ceguera instantánea.

—Me gusta fotografiar las bellezas del mundo.—Prompto me guiño su ojo derecho, haciéndome sonrojar.

—Prompto, déjala en paz.—Lo sermoneo Ignis. Minutos después ya habíamos terminado.

—______, ¿sabes cocinar?—Preguntó Ignis a mis espaldas.

—Pues no, pero aprendo rápido—Sonreí.

Éste primer día había sido muy agotador, pero puedo jurar que aun más por las terribles miradas que me dedicaba él príncipe Noctis, ¿acaso me odiaba?, no entendía muy bien la situación por la que estaban pasando, tampoco era de mi incumbencia, bien claro me dejo él rey Regis que hasta donde ellos llegaran yo me regresará. Él príncipe Noctis estaba de espaldas a mi hablando con Prompto de lo bella que era la princesa Lunafreya, algo en mi siempre sintió envidia en esa chica, tenía todo lo que ella deseaba, con la vida perfecta; cabe aclarar que como cualquier otra chica veía a él príncipe Noctis inalcanzable, algo que solo se puede tener una vez o no, él era ese chico por él que cualquiera daría lo que fuera, incluyéndome.

—¡A cenaaar!—Dijo Prompto animado.

La cena fue muy tranquila, aun que comenzaba a hacer frío todo estaba tranquilo.

—Buenas noches.—Me despedí y ellos igual, menos él príncipe Noctis.

»Narrador.

—Vaya que es linda.—Comento Prompto en voz baja.

—Mmmh.—Renegó Noctis.

—¿Lo vas a negar Noctis?—Prompto estaba bromeando—¡Oh alteza, debería de haber más chicas así en su reino!

—Ya cállate.—A Noctis le causaba gracia que Prompto fuera así de estúpido.

—Uuuy, lo digo en serio.—Comentó Prompto.

—Vamos a dormir.—Palmeo su espalda.

(...)

A la mañana siguiente _______ se encontraba limpiando su kit de enfermería, en cualquier pueblo que pararan iría a comprar más cosas para aquel kit. Llegaron a un taller, una chica rubia, extremadamente hermosa los atendió.

—Prompto, puede limpiar su saliva si usted gusta le daré una servilleta.—______ se dio cuenta de la reacción de Prompto.

—¡Oye!—Cuando Prompto se iba a comenzar a quejar _______ ya se había ido de su lado. La sonrisa estaba en él rostro de ______.

Noctis siempre tuvo la idea de que todas las chicas eran diferentes y a pesar de que la plebeya le desagradaba, creía que ella era muy diferente a todas las demás, incluso él brillo en sus ojos y la marca que se le hacia arriba de la nariz era diferente.

Blue. Where stories live. Discover now