Las mentiras no acaban.

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Austin.

-Bien Denis, tu lo pediste.

Salí y me subí a mi auto. Cuando llegué, ahí estaba... La casa del gran Benjamín Bruce. Hace demasiado tiempo que no venia, después de... Bueno, ya no importa. Llegué a la puerta y toque varias veces el timbre para que ese hijo de puta saliera rápido.

-Austin, no esperaba verte, ¿has venido por más? - sonrió.

Frunció el ceño y me acerqué más a él.

-Escúchame muy bien Bruce, no se que intenciones tengas con Denis, o que le hiciste, pero te juro que si él no deja de comportarse de esa manera por culpa tuya.. Volveré y te las verás conmigo.- con mis dos manos lo tome del cuello.

El quito mis manos pero aún así no borraba esa maldita sonrisa de su rostro.

-No tengo ninguna intención con él, esa vez solo fuimos a comer y ya. Él es el que me busca, o déjame adivinar, ¿estas celoso porque Denis me prefiere a mí y a tí no?

-El es mi amigo Ben, esta sufriendo, su comportamiento cambio, y casualmente comenzó a ser así después de salir contigo. No vengas a arruinarlo más.

-Como sea, por cierto Austin.. Toma- se dirigió al mueble que estaba a lado y saco un papel de ahí, después me lo entrego.

-¿Es una maldita broma?

-Ojalá puedas asistir- guiño él ojo y cerró la puerta en mi cara.

Definitivamente Ben es la persona más horrible que he conocido, no por su aspecto físico, el era demasiado sexy, créanme. Pero... Ese idiota es horrible como persona, no puedo enseñarle esto a Denis, si lo hago... Lo destruiría.

Yo soy la única persona que a estado con él, también la única que puede hacerlo feliz.

Me gustas Denis, no quiero que sufras más. Debes entender que él no es para tí.

Si tan solo supieras la verdad...

50 sombras de Bruce | Brustoff.Where stories live. Discover now