Capítulo 17 - Dagger

5.8K 259 1
                                    

Caminé a la clase de lenguaje.

Tarde.

-Señor Hemmings, tarde. ¿Se puede saber dónde estaba?

-Hablando con un profesor.

-Bueno, puede pasar.

-Gracias.

Caminé con la cabeza baja hasta el asiento al lado de Fizz.

Había un papel sobre la mesa.

"Razones por las que te amo"

Era la carta que escribió sobre mí aquel día que el profesor leyó mi relato sobre ella.

El día en que la vi llorar por algo que escribí.

Sonreí de lado guiñiándole un ojo.

Escuchamos al profesor y, como la terca de Alexis no quiso callarse, nos tomó evaluación.

Gracias que sabía algo.

Terminé y giré para ver a mi novia.

Tiraba de su pelo a escondidas mientras mordía el lápiz.

El profesor retiró las hojas y Fizz se golpeó la cabeza contra el banco.

Francamente, se escuchó el golpe.

Terminó la clase y se levantó rapidamente de su banco.

Traté de alcanzarla pero tuve que parar cuando entró al baño.

Se escucharon unos gritos ahogados.

Como chillidos.

Salió con una sonrisa.

Odio que haga eso.

-Estoy bien, estoy bien. -Dijo abanicándose con las manos-

-No, no lo estás. -Dije recostando mi hombro contra el pasillo- No mientas. Quiero ayudarte.

-Lukey... -suspiró- No es nada. -Dijo acariciando mi mejilla-

No pude resistirme a cerrar los ojos.

Su tacto en mi piel era algo que me estremecía de pies a cabeza.

Es muy tierna y dulce, y sé que tiene un enorme corazón por la forma en la que sus ojos te miran.

-Fizzy, -dije abriendo los ojos- por favor decime.

Coloqué mi mano sobre la de ella.

-Puedo ayudarte. En serio puedo. Y si está fuera de mi alcance no importa, muevo mar y tierra para ayudarte.

-Gracias Luke, pero... No creo que puedas ayudar.

-Si no me contás, no voy a saber.

-Es que... -suspiró- últimamente no me está yendo bien en lengua y no se qué problema tengo porque me encanta la materia. Mamá me retó y tengo "prohibido llevarte a casa".

-Yo... -tomé sus mejillas con ambas manos- no me voy a enojar por eso. Tenemos 8 horas para vernos o tal vez salir a caminar o hacer un trabajo. No me enoja.

-Gracias. -Dijo sonriéndome-

-Ven.

Abrí mis brazos ampliamente para acunarla.

Se apretó contra mí colocando su cabeza en el hueco de mi cuello.

Adoro esa sensación de sus pestañas sobre mi mejilla.

-Te amo. -Dijo a mi oído-

-Yo te amo más.

La separé de mi para atrapar sus labios.

Perfectly Good HeartWhere stories live. Discover now