Perfectly Good Heart

Capítulo 34 - Over Again

Luke POV

Sinceramente odio las mañanas, pero... ¿Qué mejor que despertarse al lado de la persona que amas?

Así es.

Ella estaba a mi lado.

Su leve respiración, su postura de bebé sobre mi pecho y su cabello todo despeinado, era una de las mejores cosas que me podrían haber pasado.

¿Quién diría que hace unos meses éramos solo desconocidos y que íbamos a llegar a tanto?

Hay veces en las que me siento torpe al recordar las cosas malas que le hice.

Esa vez en la que le dije de tomarnos un tiempo, cuando los nervios se apoderan de mí... La podría haber perdido pero, gracias a Dios, que no fue así.

Muchos deben pensar, ¿qué hay de especial en unos ojos marrones?

Bueno, demasiado.

Todos se acostumbran al color, pero es cuestión de ver más allá de eso.

Los ojos pueden transmitir muchas emociones, como los de ella.

Cuando me mira, siento seguridad, su ternura y cariño.

No mencionemos su sonrisa.

Es algo increíble saber que antes no solía compartirla, pero es un beneficio ya que pude descubrirla junto a su risa.

Hay personas que cambian mucho al hacer nuevas amistades, y en este caso, todos cambiamos.

Algunos seguimos adelante, otros dejamos la tristeza de lado, aprendimos a ser amables... Todos pudimos al menos cambiar algo.

Y yo por fin cambié mis mañanas, días y noches.

Ahora estaba acompañado por las mejores personas del mundo y la novia perfecta.

No me arrepiento de haberle propuesto de ser algo más ayer, porque realmente no quiero perderla.

Quiero tenerla en mis brazos para siempre, porque así debe ser.

Asique estoy esperando a que se despierte para abrazarla fuerte como nunca antes lo hice y no dejarla escapar.

Nunca.

Creí que chicas como ella solo existían en películas, libros o solo fantasías.

Todos tenemos un amor imposible o un tipo de persona en mente, y estoy feliz de que mi sueño se cumplió.

Ella llegó. Entró a mi vida.

Tal vez nuestro primer encuentro no fue como esperaba pero gracias a eso, pude conocerla mejor.

Esperé mucho tiempo para que la persona especial llegara a mi vida y, realmente, valió demasiado la pena.

Creo que voy a dejar de lado mis descripciones porque alguien está despertando.

- Buenos días princesa. -Dije besando su frente-

-Buen día. ¿Llevas mucho despierto?

-No. -Realmente no tengo idea-

Bajamos a desayunar luego de haber estado un ratito más recostados mientras yo la peinaba.

-¿Qué vas a desayunar? -Preguté-

-No, yo cocino. -Respondió tomando la puerta de la heladera-

-Los dos. -Dije tomando su mano-

Tratamos de hacer el desayuno y después fuimos a caminar un rato.