Vale la pena todo por ti

Capitulo (28)

Al siguiente día se vistió hermosa, se maquilló solo un poco, y se dejó el cabello suelto, como siempre. Se dirigió a la empresa y en menos de media hora ya estaba ahí.

•Buenos días• Dice Nicol.

•Buenos días, ¿La acompaño?•

•No gracias, ya se llegar•

Ella se aproximó hacia la entrada y entró como si conociera la empresa de hace tiempo, con una confianza extraordinaria.

Cuando ya estaba un poco más adentro, alguien la llamo…

•¿Disculpe?, ¿La puedo ayudar?• Preguntó una mujer.

•Sí, ¿Me podría decir dónde puedo encontrar a Mercedes?•

•Ella está en el último piso•

•Muchas gracias•

•¿Usted quién es?•

•Nicol Morgan, abogada de la empresa, si es que así se le llama•

•¿Usted fue una de las entrevistadas?•

•Si•

•Que bien, mucha suerte•

•Gracias•

Temió al escuchar ese “Buena suerte”, ¿Con que intensiones lo diría?, Pensaba Nicol mientras subía por el ascensor. Cuando llegó, dio un soplido, sí que eran pisos. Rápidamente vio al chico que le hiso la entrevista.

•Hey, Hola, buenos días• Dice Nicol, caminando rápidamente, para que él la escuchara.

•Nicol Morgan, que bien que llegaste ya, buenos días, estas bonita• Dice él sintiéndose avergonzado por lo que dijo, pero aun así ya no podía echarse para atrás, al fin y al cabo era verdad.

•Gracias• Respondió ella con extrañeza.

•Disculpa si te incomodé, es solo que es cierto•

•Tranquilo•

•Bueno, vamos para que conozcas al presidente•

•Me parece bien•

Ella estaba nerviosa, tenía las manos frías, pero no se hacía denotar. El chico tocó la puerta y alguien al otro lado respondió •Adelante• ellos entraron, Nicol ve a una persona de espalda, se le hacía conocido, pero no llegaba a ver quién era.

•Jefe he traído a la chica que ha sido aceptada como la nueva abogada de la empresa, su nombre es Nicol Morgan y tiene...•

•¡¿Qué?!• Dice con Voz de sorpresa el jefe, él voltea rápidamente, Nicol al verlo de frente lo conoció, era él, de la impresión de llevó las manos a la boca y exclamó con voz suave pero que se escuchó perfectamente…

•¡Cristian!•

•¿Qué pasa?• Pregunta la mano derecha del jefe.

•Sal Cesar, retírate•

•Pero señor…•

•¡He dicho que salgas!•

•Está bien•

Él sale, Cristian se mantuvo quieto sin apartar un ojo de ella, Dios mío, estaba tan bella, estaba igual que siempre, sencilla, pero ese vestido se le veía hermoso, tenía su cabello más largo, le llegaba un poco más abajo de las cadera, totalmente natural, sus mejillas estaban rosadas y sus labios rosa oscuro, el vestido no era tan largo pero hacia que se notaran sus piernas largas y blancas y el color azul hacia que sus ojos brillaran, nunca la había visto con vestido, llevaba accesorios y unas zapatillas negras, no podía creer que la tuviera enfrente de él.