CERO

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Su mirada estaba llena de confusión y temor, sus manos temblaban y parecía que iba a juego con su respiración acelerada. "Corre, sigue corriendo y no gires" Sus pensamientos eran una carrera de autos tratando de llegar a la meta, pero no había ninguna meta cercana mas que la de seguir con vida. Haber matado a varias personas solo para poder escapar era algo que Christian encontraba fuera de este mundo, pero sabiendo en la situación actual en la que se encontraba era imposible de pensar que algo que en años anteriores se denominaba "locura" sea una cosa completamente normal en estos días.

Había escapado de la locura de ellos, pero ¿Podría escapar de la locura en la que el mundo se encuentra?

La sangre que corría todo su cuerpo le provocaba nauseas, solo quería irse de allí sin lastimar a nadie, pero su plan termino siendo lo opuesto. Christian se movía entre tropezones y trotes mezclados. Su propia voz en la cabeza le gritaba que siguiera corriendo sin mirar atrás, si terminaba viendo su pequeño acto de rebeldía, iba a terminar arrepiéntase más de lo que estaba, el no deseaba matar a nadie, pero era su vida contra la de ellos. El sol empezaba a serle molestia y quería quitarse la ropa allí mismo, pero no había ni una casa o tienda cercana donde pudiera buscar por un par de ropa nueva. Christian siguió y siguió por horas -quizás-, o quizás fueron solo minutos, sus labios se sentían secos y quebrados, sus manos habían parado de temblar, pero su corazón seguía latiendo como en una carrera.

El estaba mas que seguro que estaba expuesto a que los zombies vayan por él, pero a su buena suerte ninguno estaba cerca. Era muy loco pensar que el sin un arma para poder defenderse no aparecía ningún zombie, ni siquiera en las mejores películas que veía de pequeño el podía recordar que el protagonista le pasara aquello.

Un par de horas después de estar metido entre arbustos secos y basura, logro llegar a lo que parecía el comienzo de la civilización, una casa abandonada como muchas otras parecía ser la salvación en esa noche, especialmente que la noche amenaza con llegar más temprano de lo usual. Con cuidado logro pasar por el hueco de una valla de madera, el patio trasero estaba obviamente sucio y con el césped hasta arriba sin podar. Hizo su paso entre el césped mientras la suave brisa movía su cabello de lado.

¿Lo mas raro que Christian pensaba? Que sentía una extraña sensacion de hogar.

Su famoso sentido de peligro le gritaba que se alejara de allí, que es una mala idea entrar a una casa en la que no tenia idea que iba encontrar, pero... ¿Cuáles son sus posibilidades ahora? Ninguna; era entrar a una casa todo débil a que estar fuera en la noche sin ninguna protección, sin contar de que tenia ciertas heridas pequeñas por su torso de todas las cirugías que le hicieron para poder "examinarlo", heridas que traían horribles recuerdos y sensaciones, heridas que nunca terminaban de curarse totalmente.

Se apoyo en el marco de la puerta que separaba la cocina y la sala, mirando el lugar con cierta calma y a pesar de que todo estaba sucio, y desarreglado, no le importaba. Con pasos silenciosos se fue acercando hasta la parte donde estaba colgados unas fotografías familiares. Una de ellas tenía el vidrio cuarteado, pero no había ninguna foto en él, examino la siguiente foto que mostraba a una pareja de ancianos sonriendo, sin darse cuenta, una pequeña sonrisa apareció en sus labios recordando lo que era una pareja feliz.

En su expresión se llenó de vacío, o mas bien una ola de tristeza lo lleno al pensar en su familia, recordaba la ultima vez que los vio fue unos días después de que declararan el país -y luego el mundo entero- en estado de emergencias debido a los nuevos brotes de una enfermedad que la mayoría no tenía ni la mínima idea. Se había ido con su hermana mayor y su familia a cierto lugar para poder estar a salvo, pero no recordaba más, no recordaba que paso con su hermana ni mucho menos recordaba que había pasado con sus padres.

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