Capítulo 4

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Jacob

Al día siguiente desperté junto con Misaki al mismo tiempo, le sonreí al verla a mi lado abrazándome. Nos quedamos en la cama por unas horas mas hablando de tonterías hasta que me canse de estar acostado, me levante y le dije que iba a ducharme. Salí del cuarto de ella y me fui al mío a tomar mi baño.

Hoy tendría el día muy ocupado tengo que rastrear a una tal Pearl Attaway, la encontré y la seguí todo el día era una mujer sumamente aburrida, lo único bueno que pudo hacer fue cambiarse el vestido por otro, tenia buen cuerpo pero no me llama mucho la atención le faltaba mas entrenamiento. La noche llego y su ómnibus fue atacado y prendido fuego, logre hablar con ella y me pidió que vaya a verla dentro de media hora en su casa. La media hora paso y como Misaki estaba conmigo me pidió hablar solo conmigo, le tuve que decir a mi amiga que me esperara fuera y cuando ella se fue, Attaway se me abalanzó con intenciones nada puras que no me iba a negar.

Misaki

Dios, este hombre tarda tanto. Ya paso una hora y el no aparece, me estoy muriendo de frío y por si no fuera poco empezó a llover y no ahí donde refugiarme. Se acabo iré a buscarlo, me subí por la pared y llegue hasta una ventana en donde no podía creer lo que veía, ese maldito revolcándose, me fui de inmediato estaba sumamente molesta con el, me hizo acompañarlo para que estuviera como idiota.

La lluvia se convirtió en tormenta, había encontrado un pequeño techo de la puerta de una tienda y me senté debajo a esperar que la tormenta parara pero solo hizo más que empeorar. El frió que sentía me llegaba hasta los huesos, estornudaba, tosía y me dolía la cabeza...lo que me faltaba que me enferme, será mejor que corra hasta el tren me pare y apenas empezar a correr todo se obscureció. Cuando abrí los ojos de nuevo estaba en mi camarote del tren, mire a los lados y me percate de que Jacob estaba durmiendo en una silla al lado de mi cama...lo tome del cuello de la camisa y lo tire fuera de mi cuarto.

¿¡Que diablos te pasa!? ¡Misaki abre la puerta!

¡Vete al diablo! ¡Te pusiste a revolcar con esa zorra y me dejaste afuera en la tormenta por más de dos horas!

¡Te hubieras ido! ¿¡Para que carajo me esperaste!?

¡Porque me pediste que te esperara idiota!

...lo siento Misaki, ábreme la puerta por favor estas muy enferma.

Aléjate Frye, no te quiero cerca por el momento.

Misaki, tienes 39 de fiebre. Abre la puerta ahora, tengo que cuidar de ti me tienes preocupado.

¡Que te vayas idiota!

Jacob

No le respondí tras de gritarme así, solo me apoye en la puerta y me deslice en ella. Fui un entupido, me siento muy culpable y todo por un momento de calentura. Al día siguiente ella me dejo entrar y me quede a su lado todo el día, no pensaba en moverme hasta que Misaki se recuperara del todo.

Una semana mas tarde ella por fin se recupero pero aun seguía molesta conmigo, me dolía mucho y al fin me di cuenta que si estoy loco por ella...la amo pero no le voy a decir nada, solo me voy a quedar cerca para cuidarla hasta que al menos ella se le pase la rabia que me tiene.

Esta misma noche debo matar la causa de todos los problemas que tuve últimamente, además que es una asquerosa templaría, nuestros negocios terminaron Attaway. Entra a la casa y me oculte en su cuarto, una vez que ella apareció salí de entre las sombras haciendo que ella se espante.

Hace bien en temer señorita Attaway.

Señor Frye casi me da un susto de muerte. ¿Haz eliminado a los objetivos?

Si pero me falto uno.

Entonces deje de perder el tiempo y acabe con el.

Si insistes.

La apunte a la cabeza y ella solo me observo estupefacta, solo jale el gatillo y me fui como si nada a verme con Misaki en un restaurante que después de tanto rogarle que me dejara compensarla acepto. Corte algunas rosas rojas que había en un parque cercano y me adentre al restaurante para luego tomar asiento, al poco tiempo ella llego y por primera vez actúe como un caballero, me pare y la ayude a sentarse luego de darle las rosas.

¿Qué tramas? No es tu estilo hacer este tipo de cosas Jacob.

Solamente intento hacer que me perdones. No me gusta la distancia que pones entre los dos, cuanto más me acerco mas te alejas y es desesperante. Te pido que me perdones, juro que nunca mas ocurrirá...por favor te pido de todo corazón. Si hace falta me arrodillo aquí mismo frente a todos.

Exageras, no te creo capas de que hagas una cosa así.

Pues si soy capas y soy capas de humillarme también.

Misaki

Creo que jacob tuvo suficiente, una semana de no hablarle y mirarle con odio le afecto mucho. Noto preocupación y tristeza en sus ojos, me da una ternura que este así pero esta sufriendo y sinceramente no me gusta verle así, me pone mal a mi también.

...De acuerdo, voy a perdonarte pero no quiero que haya una próxima vez.

Solo basto esas palabras, solo basto esa frase y el se me abalanzara hacia mi haciendo caer la mesa y su silla, solo para que me besara con intensidad. Como resultado de la acción de Jacob nos echaron del lugar y terminamos comiendo en una taberna, una de las más peligrosas. Me siento más cómoda en comer en un lugar así que en un lugar en donde todos observan si cumples con las normas de la educación y esas estupideces.

Terminamos de cenar y Jacob me llevo hasta el Río Tamesi, no entendía muy bien para que el me iba a llevar ahí a altas horas de la noche pero al llegar lo entendí, estaba muy inquieta y nerviosa...jamás imagine que el iba a decir lo que me dijo.

Misaki, escucha tengo algo importante que decirte y no tienes que darme una respuesta ahora, puedes hacerlo cuando quieras. Tienes cosas que jamás vi antes en una mujer, eres alguien increíble, valiente, hermosa, inteligente, divertida, fuerte, carácter muy fuerte y más cosas que me tienen loco por ti. Estoy perdida y locamente enamorado de ti, miro tu cara y se que no te sientes cómoda con lo que te estoy diciendo pero tenia que decírtelo, tenia la necesidad de decirte esto. No tienes idea de cómo me haz echo cambiar, antes de conocerte no me importaban el credo de los asesinos pero ahora lo estoy honrando cada vez mas, ya no soy tan irrespetuoso como antes pero sigo siendo yo mismo, aun tengo mi esencia de quien soy y que espero que en algún momento me amas como yo te amo, te voy a esperar incluso en mi lecho de muerte.

Vaya...Jacob...no se que decirte.

No debes decirme nada, piensa todo el tiempo que necesites porque siempre te voy a esperar aunque me digas no.

Desperdiciarías tu vida esperándome.

No la voy a desperdiciar porque valdrá la pena.

Quería reprocharle esas palabras pero volvió a besarme, un beso muy diferente a los dos anteriores que nos dimos. Nuestro primer beso sentí lujuria, el segundo sentí cariño y este...este esta lleno de amor y pasión. Era un beso lento y amoroso, no pude no corresponderle se sentía muy bien...Ahora en lo único que puedo pensar es que debo darle una respuesta...si o no.

Assassin's Creed Syndicate: Lazos RotosWhere stories live. Discover now