1 - Despedida

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Ser transferido de preparatoria ingresando al segundo año no es nada divertido. Uno ya tiene sus amigos hechos, sus actividades organizadas, se gana su puesto en algún club, entre otras cosas. Inoue Akane empezaba a pasar por eso. Aunque a ella se le daba bien lo social tal vez no tenía mucho de qué preocuparse. La gente se le acerca como imán al metal y ella comprendía perfectamente el porqué, al mismo tiempo que lo odiaba. A pesar de considerarse a sí misma como una persona simpática y divertida también tenia sus momentos irritantes donde rechazaba a cualquier ser vivo que se le acercara, excepto por su vecino y amigo de infancia, que bien que cuando ella pasaba por esos momentos oscuros él la ponía en vereda y la hacía reaccionar.

Akane era consciente de que aquella separación era lo más difícil de todo, ya que no solo se marchaba del Instituto Kaijo sino que también se iba a 400 km de Kanagawa, ella sin él ya no sería la misma.

Se preparaba mentalmente para aquello, tomando la complicada decisión de no hacerse amigos ni hablar con nadie siendo consciente de lo difícil que iba a ser eso. Su apellido llamaba a las personas.

- Entonces ¿El vuelo sale mañana?

Preguntó el azabache con la vista fija en la copa de los árboles que danzan con el viento. Era una tarde fresca pero a ellos no les importaba en lo más mínimo. Necesitaban conversar antes de partir y qué mejor lugar que el parque que siempre compartieron de niños.

Ella asintió jugando nerviosa con sus dedos sobre sus piernas. No querían verse a los ojos, no querían porque dolía saber que sería la última vez que se verían en un largo tiempo.

- No irás a despedirme ¿Cierto?

La voz de la peliplata sonó débil, como si estuviera a punto de hacerse pedacitos.

- Tu no quieres que vaya.

Carraspeó él con un tono molesto. Ella sonrió y dejó de jugar con sus manos para mirar al ya anaranjado cielo.

- Me harás llorar si vas y me niego a pasar vergüenzas en público.

La miró sorprendido. Sabía perfectamente que esa era una excusa estúpida.

- ¿En serio? Te la pasas avergonzándome en los partidos con tus gritos, esto no sería nada nuevo.

- ¡Que malo eres, Yukio!

Se quejó dolida.

- Ellos no irán ¿Cierto?

Cuestionó repentinamente dejando en blanco a su amiga. ¿Tan obvio era que ni sus padres iban a ir a despedirla? Ni siquiera el hecho de que su propia hija se vaya a otra prefectura lejos por años, era motivo suficiente para despegarlos de sus trabajos.

- No los veo desde ayer y tampoco podré verlos mañana. Tienen algunas reuniones importantes.

- ¿Más importante que esto, Akane?

Ella sabía lo grave de la situación pero le restaba importancia. Estaba acostumbrada a no verles el rostro ni oír sus voces. Esto no le sorprendía en lo más minimo pero tenía que admitir que aun así, dolía.

- No hay bronca. -sonrió de forma ladina para ocultar su malestar- Me extrañarás ¿Cierto? No puedo creer que vaya a perderme tu último año y encima como capitán del equipo de basquet.

- Y yo no puedo creer que hayas perdido la vice-capitania del equipo de voleibol.

- ¡No me lo recuerdes!

Esa era otra parte dolorosa de la historia. Ni bien pasó a segundo año, le habían ofrecido ser vice capitán de su equipo. Un gran logro ya que mayormente tanto capitanes como vice son de tercer año. Ella se sintió una prodigio, pero la emoción no le duró mucho ya que a dos meses de tal oportunidad se le informó de su transferencia.

- ¿Crees que tengan buenos equipos en Rakuzan?

Agregó con una gota de esperanza.

- No lo dudo. Al menos su club de basquet
tiene un gran nivel.

Akane y Kasamatsu charlaron recordando viejas anécdotas hasta que la noche finalmente cayó. Se despidieron con un gran abrazo y prometieron volver a verse pronto. Ella esperaba poder escaparse de Kyoto aunque sea para poder asistir a la ceremonia de graduación de su amigo.

- Espero encuentres alguien como yo para que no te aburras ni me extrañes.

- Espero que no. -la miró con maldad sabiendo que sacaría de quicio a la muchacha- Espero tu encuentres a alguien que te soporte como yo lo hice.

Agregó y esta sonrió mientras se le reventó una vena de la sien.

- Me rogarás que vuelva en dos semanas.

Se quedaron viendo con desprecio unos segundos para luego reír. Realmente se echarán de menos. Mientras tanto tenía un largo año por delante para lidiar con cosas nuevas, y más que nada, controlar su personalidad.

¡Buenas tardes/noches/días... o cuando sea que lean esto!

Hoy doy inicio a una nueva historia, esta vez basada en la serie Kuroko no Basuke.

Me vi las tres temporadas en menos de quince días y quedé fascinada con unos cuantos personajes ♥ Como la portada obviamente muestra vamos a girar sobre Akashi Seijuro.

Nada, me hizo amarlo ni bien apareció, quedé prendada a él en dos segundos. Es un crack y me gusta mucho su historia personal.

No les voy a spolear nada, pero espero les guste mucho y veremos que sale de esta cabecita :)

Amo odiarte | Akashi SeijuroWhere stories live. Discover now