complicaciones

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— Que Ascó, odio vomitar

Susurro mientras tomo el cepillo de dientes para lavarlos,  odio vomitar, y esta es la tercera vez que lo hago en el día

— ¿Mejor?

— Solo un poco

Caleb me lleva en brazos hasta la cama y me acuesta en ella

—  Alex ¿Donde esta?

— Fue Por un par de cosas  a tu casa, pero debe de estar devuelta pronto

— Debo ir a casa, mi madre se preocupara

— Alex de seguro se ha encargado de decirle a tu madre, no quiero que te angusties

—  Es imposible por ahora, vamos a la cocina tengo hambre, además es muy temprano para estar en la cama

Apartó el cobertor y salgo de la cama mientras caleb me sigue de cerca, está preocupado, su rostro me lo indica, no se lo que le angustia tanto, llegamos a la cocina, tomó asiento en un taburete mientras Caleb comienza a husmear en la heladera

— ¿Qué quieres comer?

— Un sandwich

— ¿Pavo o carne?

— Pavo

Su actitud era extraña, como si temiera decirme algo

— ¿Pasa algo caleb?

— No...... que debe pasar

— No lo sé, por ello te preguntó...

— Espero que haya traído todo lo que necesitas

Alex hizo presencia en la cocina  me dió un beso en la mejilla mientas ocupaba un asiento junto a mí

— Que silencio  ¿Qué ocurre ?

— Lo mismo  le estoy preguntado a caleb

— Esta bien, hay cosas que tenemos que hablar, y una de ellas es que pienso que deberías decirle a Jack sobre él  bebé

— No quiero hablar de ello de nuevo ya les he dicho

—  No puedes volver a tu casa por ahora

— ¿Porque?

— Vamos hombre no....

—  ya quiero que me dejen de ocultar cosas  ya basta

Me levanto molesta del  asiento y rápidamente intentó sujetarme de algo puesto que mis piernas no responden

— Susan ...

Ambos hombres llegan a mi lado, y me ayudan a levantarme

— No siento las piernas  Que me está pasando

Rápidamente Alex me lleva a la habitación mientras que caleb llama por teléfono, Álex me acuesta en la cama  Y con mucho horror descubro que no puedo moverme sólo la cabeza

— No Siento mi cuerpo

— Mueve tu mano derecha

— No puedo Alex... no puedo

La desesperación se apoderó de mí, ni siquiera podía mover mis manos

— Alex que me está pasando, tengo miedo Alex...

Un hombre como de unos 30 años se acercó rápidamente a mi  y comenzó a atenderme, después de colocar una vía con suero en mi brazo se acerca a Caleb

— Justo lo que temía

dijo cuando llegó a la altura de caleb

— ¿ Qué me ocurre?

— El tiene que...

— ¡Dígame que es lo que tengo!

El médico se acercó mientras asentía despacio

— Es su hijo, esto lo está causando su gestación dentro de usted, es hijo de un antiguo y es muy fuerte, no es un bebé común, en algunos casos suelen nacer con dones muy poderosos

Mi mente era un total revoltijo de palabras

— ¿Voy a quedarme así?

— No lo sé Alteza, es algo que no puedo predecir

Me eché a llorar  sin importarme que los tres hombres me vieran, caleb y Alex se acercaron hasta mi y ambos intentaban consolarme

—  Tranquila Su, ya verás que todo se arreglará por favor, no llores

— Si nena, ya lo verás

Cerre los ojos  mientras los escuchaba , de pronto un letargo me invadió el cuerpo, abrí los ojos y vi como el médico terminaba de inyectarle algo a mi suero

— Descanse Alteza

Volví a cerrar mis ojos esta vez para quedarme completamente dormida....

JACK

los días pasan volando  y Un así no me acostumbro a la ausencia de Susan, muchas veces creo oir que me llama, pero se que no lo hace ni lo haría, este es mi castigo vivir sin mi Luna, he intentado con todas mis fuerzas no tomar un maldito avión e ir por ella, pero ya no quiero lastimarla mas, aunque si estoy rumbo  a EEUU no iré a buscarla, solo tratare asuntos de negocios....

Gracias por la espera y por seguir leyendo mi historia

En  las Garras del LoboDonde viven las historias. Descúbrelo ahora