-¿Quién es Aoibheal? -me preguntó Manu.
-No tengo ni idea. -le respondí.
-¿Sabes quién te ha llamado? -insistió él.
-No, solo me ha preguntado si era Sara, yo le he dicho que sí, él nos ha invitado al cumpleaños de Aoibheal y ha colgado. -le conté.
-¿Él? -preguntó Lucas.
Lo miré enarcando una ceja.
-Solo mantengo esta conversación con mi hermano delante vuestra porque no tengo otro remedio. -le respondí enfadada. -No lo hago por gusto y no voy a contaros nada de nada.
Lucas se quedó callado. No se esperaba esa respuesta. Yo tampoco esperaba que me obligara a hablar por teléfono delante de todos y lo había hecho. Había apoyado a Miriam, aunque decía estar enamorado de mí. Y dejaba que lo tocara. Esto último hacía a mi tigre rugir y desear arrancarle la mano a esa loba.
-Pues vete. -respondió secamente.
-Gracias por darme tu permiso, ya pensaba que tendría que quedarme aquí para siempre. -le respondí irónicamente. -Cuando su majestad esté dispuesto, le agradecería mucho que fuera a curar a mi hermano.
Al acabar de hablar, agarré a Manu del brazo y salí por la puerta que ya no estaba cubierta por ningún lobo.
-Esa chica... -empezó a decir mi hermano. -¿Es la loba que atacó a Esteban?
-La misma.
-Tiene cara de amargada. -dijo.
No pude evitar reírme.
-Yo también pienso eso. -dije riéndome más fuerte.
-Menos mal. -dijo aliviado. -Ya pensaba que era el único que lo veía.
Reí más fuerte. Y Manu también. Entonces me pasó el brazo por encima de mis hombros y me acercó a él. Me dio un beso en la mejilla y dijo.
-Me encanta verte reír, hermanita. No ocurre a menudo.
Le devolví el beso.
-Lo siento. -dije en respuesta.
-¿Por qué? -preguntó.
-Por estar a veces tan triste y apagada. A partir de ahora estaré más animada, lo prometo.
Me sonrió. Entonces retiró el brazo y empezó a buscar en sus bolsillos.
-¿Qué haces? -le pregunté curiosa.
-Me acabo de acordar de que no te di tu regalo de cumpleaños. -respondió.
-Bueno, yo tampoco te he dado el tuyo. -dije. -Estamos empatados.
-Aquí está. -dijo sacando una caja pequeña de color negro del bolsillo. -Toma.
La cogí curiosa. ¿Qué podía haber dentro? Al abrirla me quedé sin aire. Lo miré sorprendida.
-Feliz cumpleaños, Sara. -dijo sonriendo.
Lo abracé muy fuerte.
-Gracias. -le dije. -Te quiero.
-Y yo a ti, hermanita. -dijo devolviéndome el abrazo.
-¿Sabe Carlos que me has regalado una moto? -le pregunté.
-Claro. Le pregunté antes de pagarla. No estaba muy de acuerdo, pero como sabe que tenías muchas ganas de una, cedió. -me contó.
Era verdad. Siempre había querido una moto. Iván se había comprado una hacía unos meses atrás y me había enamorado de ella. Le había pedido a Carlos que me dejará pagarla con el dinero que había sacado dando clases a niños en verano, pero él se negó. Manu había trabajado también dando clases a niños y ambos habíamos sacado una buena suma de dinero.
![](https://img.wattpad.com/cover/7366303-288-k359062.jpg)
VOCÊ ESTÁ LENDO
Tan sólo dos días (SUSPENDIDA DE MOMENTO)
Teen FictionPara una chica su decimosexto cumpleaños es siempre algo especial, pero más aún para Sara. Huérfana desde que tenía diez años, vive con sus cinco hermanos y su mejor amigo en la casa que sus abuelos les dejaron al morir. En su fiesta de cumpleaños...