Perfect Storm © (ICSTS#2 jb)

Capitulo XXVII

Terminamos el pequeño encuentro a eso de las doce de la noche, ya por fin podría ir al hotel y disfrutar de la compañía de Justin. Ni tiempo tuve para avisarle que me atrasaría en el concierto.

Fue todo muy exitoso y para mí fue otra noche de triunfo. William volvía mañana a Los Ángeles, encontró trabajo y para venir pidió permiso. Eso me demuestra que no me buscó por dinero.

Aprieto el botón de la suite una vez en el ascensor y ponen de estos holográficos en una pantalla arriba, va de construcción del ascensor a medida que subimos. Me recuerda a la primera vez que subí al Empire State, la imagen es muy similar. Nueva York es impresionante y tan poblado, allí paso desapercibida entre tanta gente en Times Square. Pronto estaré allí de nuevo, ya es tiempo de renovar el armario.

Entré sigilosamente pensando en el sueño de Justin, sin embargo, la televisión estaba encendida y el ojimiel encima de la cama con un gran bol de cabritas. Me miró con el ceño fruncido.

— ¿Por qué tan tarde? —su voz suena ronca y pesada—. Íbamos a reunirnos aquí a las once como máximo y ya van a ser las una de la madrugada.

—Lo siento —me senté a su lado—. Tuve un atraso con el evento antes del show y lo corrí para después de este mismo. Ya estoy aquí, cariño. Me esperaste y eso lo aprecio mucho —mis labios hicieron contacto con los suyos—. Aún podemos disfrutar lo que nos queda de horas aquí.

—Dime algo ¿me quieres? —tenía sus manos en mis mejilla ahuecando mi cara—. ¿Cuánto? ¿Es solo cariño o me amas?

—Te amo, Justin. Lo sabes ¿a qué viene todo esto? —me preocupé.

—Me asusté al ver que no llegabas, pensé que cambiaste de opinión respecto a dormir juntos —suspiró—. Necesito asegurarme de que es real lo que sientes, ya demostré que mis sentimientos son reales. Ambos lo hicimos ¿no crees que ya es momento de dejar esto sin nombre?

—Justin, estoy esperando a que me lo pidas. Son tus palabras las que valen ahora, si no eres directo, seguiremos siendo entre algo y nada —confesé, tal vez sigo llevándome a la antigua, donde debe ser el hombre que le pide a la chica ser novios.

—Bien, si así lo deseas —me tomó de las manos—. Primero tienes que perdonarme por lo poco especial que será esto, pero debes entenderme que estoy desesperado por tenerte solo para mi —reí—. Amanda, preciosa, luz de mis ojos. La mujer que quiero para el resto de mi vida, que mis hijos tengan tus facciones y que juntos podamos cuidarlos, verlos crecer. Ser felices como siempre hemos querido, que en un futuro la gente deje de intentar de tirarnos para abajo, con mis fuerzas espero poder vivir esos momentos contigo. Señorita Sawyer ¿aceptaría ser novia de este desgraciado tipo que lo único que hizo en un principio fue hacerle daño a una dama en apuros? El muchacho está dispuesto a seguir mejorando con tal de mantenerla a su lado. Es una promesa. Amy, respóndeme ¿quieres que seamos una pareja?

— ¡Justin! —chillé emocionada con sus palabras—. Te amo, te amo, te amo —repartí besos por su cara hasta llegar a sus labios—. Si quiero —sonreímos entre besos.

Nos acomodamos en la cama sin ninguna otra intención aparte de amarnos, a besos y toqueteos. Las cosas transcurrieron pero no pasamos de eso. Abrazados pusimos play a la película que el rubio estaba viendo anterior a mi llegada.

La felicidad llenaba mi corazón, cada día me enamoraba más de alguien que pensé inalcanzable. Me refiero a que pasamos tantas cosas, terminamos tantas veces y aquí estamos de nuevo. Pero esto es diferente, los dos nos encontramos estables emocionalmente y haremos lo posible por quedarnos así, es momento de que la madurez que tanto hablamos se haga presente. Estamos en gira y las cosas podrían tornarse complicadas, pero ¿para que seguir pensando en el futuro, en el destino? Si es que este último nos tiene preparado terminar de nuevo, por más que duela, así será. Creo mucho en ese tipo de cosas, y seguiré con ello.

— ¿Verdad que quieres que tengamos hijos? —recordé sus palabras—. ¿Cómo llamarías si fuera niño o niña?

—Tendremos la parejita, el pequeño se llamará Birger y ella Christiane —frunció la boca.

— ¿Birger? ¿Estás de broma? —golpeé su pecho—. Por nada en el mundo nuestro hijo se llamará así ¡imagínate cómo lo molestarán en el colegio por su nombre! Aunque debo admitir que para la niña me gusta Christiane, yo elijo el nombre del varón.

— ¿Eso significa que estás dispuesta a tener bebés con este guapo? —se apuntó. Sus ojos brillaban llenos de ilusión.

—Ya sabes, lo que nos tenga preparado el destino. Y la idea me parece bien, porque te amo —bajé mi tono de voz sintiendo la sangre subir a mi cabeza.

—Te amo también, princesa —agarró mi cintura subiéndome a su regazo.

Tenía una vista desde su torso hasta su cabello. Pasé mi mano por su cabeza llena de tiras de cabellos gruesas. Me gustaba, me encantaba como le quedabas.

—A pesar de lo precioso que te ves con estos —tomé uno para que supiera de lo que hablaba—, extraño poder acariciar tu pelo, era muy suave. Incluso lo tenías más cuidado que yo con el mío.

—Pronto desaparecerán, me gusta probar cosas. Esto ha sido una locura que al parecer muchos se lo tomaron bien. La próxima vez me acompañarás a hacerme el cambio de look —sonreí acostándome encima de su anatomía. Su respiración chocaba en mi nuca. Su cuello estaba a menos de un dedo de distancia con mi boca. Sonreí traviesa sin que me viera. Me acerqué humedecí una zona haciéndole soltar un gemido, comencé a morder y chupar por varios minutos, su respiración se agitó y supe que debía parar—. Maldición, nena. Tendré una marca bien grande.

—Tal vez ese era mi propósito —ronroneé—. Ahora que somos novios debería asegurarme que ninguna guarra se acerque a mi propiedad.

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ES TARDISIMO😭😭
Tengo que admitir que se me había olvidado actualizar :(, pero ya estoy aquí.

ESPERO QUE LES GUSTE💋💋

LOS AMOOO.