Capitulo 36

3.4K 191 12
                                    


Después de haber tenido relaciones, se quedaron recostado, pero de pronto, Naruto recordó algo muy importante que lo más probable es que a Hinata no le guste.

–Hinata-chan, tengo algo muy importante que debo decirte–dijo con un tono de miedo, cosa de percibió la Hyuga

–que sucede, Naruto-kun–pregunto, entonces procedía a contarle acerca de que por ser el último varón de su clan, está bajo la LRC y por ende, va a tener muchas esposas

–Entiendo si después de esto, ya no quieres saber nada de mí, pero creo que es lo mejor ya que tú te mereces a alguien que solo vele por ti y no a una persona que tiene que amar a varias mujeres– decía mientras giraba su cabeza para que no vea la reacción de Hinata, de pronto sintió las manos de Hinata en la cara para que la girara y la viera de frente, luego lo beso.

–Yo ya sabía eso, se quiénes son tus padres, además de que no se te olvide que soy la heredera de un clan y por ende, se de la situación en la que estas– decía con una sonrisa mientras sorprendía a Naruto de que sabía de su ascendencia– yo solo quiero estar a tu lado, no importa con cuantas más deba compartirte, te amo y serás al único hombre que podre amar en esta vida y en las vidas que sean posible vivir– ante esto, el rubio le salieron unas lágrimas de felicidad y la beso con toda la felicidad que sentía.

–No sabes lo feliz que me haces– dijo mientras la abrazaba.

–Pero tengo dos condiciones–dijo Hinata

–Cual condiciones–pregunto con miedo y el mismo ni sabe porque

–La primera es que yo tengo que autorizar a tus otras esposas, quiero que estén contigo, no por interés, ni ambición, sino porque te aman de verdad–dijo acariciando las marcas de las mejillas del rubio, –y la segunda y más importante, es que yo quiero ser la que te dé al primogénito, naruto-kun–decía sonrojada mientras imaginaba tener entre brazos a un pequeño niño rubio, con los ojos tan azules como los de su padre.

Con esto, también Naruto se imaginó a una niña de cabello azulado, con sus marcas de nacimiento igual a él, pero con la mirada angelical de su madre.

–Por supuesto, nada me haría más feliz que tener hijos contigo–decía Naruto mientras le besaba la frente.

–Ahora solo queda algo que tenemos que hacer– dijo Hinata.

–Qué cosas–pregunto

–Tú tienes que hablar con mi padre para que nos dé su bendición y yo hablar con Kazumi-chan para que me dé permiso de estar a tu lado– dijo Hinata con un poco de miedo–y temo que mi padre se oponga a lo nuestro.

–No tienes nada de qué preocuparte–decía Naruto– tu padre estará de acuerdo– dijo confiado.

–Porque estas tan seguro– pregunto Hinata.

–Je je pues, este...– decía mientras pensaba en algo, ya que lo de su contrato matrimonial es un secreto que saldrá a la luz cuando sus padres regresen– imagínate si se entera de mis padres y que puede aparentar con uno de los clanes cofundadores de la aldea, sería un gran prestigio no lo crees, jeje. Bueno, creo que es hora de regresar al campamento, antes de que alguien despierte y note nuestra ausencia.

Luego, procedieron a vestirse y se encaminaron al campamento, tomados de las manos, se dieron un último beso y ambos entraron a las tiendas para descansar

Una vez amaneciendo, los primeros en despertar fueron Naruto y Hinata quienes se dispusieron a preparar el desayuno, luego todos despertaron.

–Buenos días, como amanecieron– pregunto Naruto

Naruto y el despertar del cosmosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora