CAPÍTULO ONCE

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Seguía estando solo, aun cuando ese castillo estaba lleno de gente —vampiros—, aun cuando Luhan entraba a la habitación de vez en cuando para cerciorarse de que siguiera allí, y ahí estaba y no pensaba volver a salir de esas cuatro paredes.

De la nada había empezado a sentirse triste, solo y melancólico, luego se enojaba y terminaba riéndose ¿Quien le había infectado de esa bipolaridad?

Sehun no había aparecido ni una vez. Y bueno, de que se quejaba ahora, si antes el había evitado a toda costa el estar con él en una situación incómoda. Y en susurros, se arrepentía.

¿Quién lo entiende?

Ha extrañado a ese vampiro desde que se había ido, había soñado con él y hasta se había puesto a llorar —Sin motivo que él quisiera reconocer—, pero, cuando llego la hora de verle, la cobardía se apodero de él y lo había evitado a mas no poder. ¿Por que? No lo sabía, no sabía como explicarlo, no lo entendía.

Ser humano era tan complejo y la vez tan simple.

Ese extraño deseo de estar con él.
No era que fuera una sensación nueva, siempre ha sentido esa necesidad de estar cerca de Sehun, pero últimamente, ese sentimiento le estaba asustando. Le quiere ver, lo anhela, pero prefiere huir para no tener que contener esos sentimientos que cada día parecían mas indomables. Pero, las preguntas seguían siendo ¿Por que? ¿Que es lo que me pasa? Y a final del día nunca había una respuesta. Y siempre su pendiente quemaba.

El sol se había marchado hace mucho tiempo, y ahora en la noche reinaba la orgullosa y prepotente luna llena.

Se encontraba en el gran balcón de dicha habitación. En Londres las noches también eran frías, pero no tanto cono en Bélgica. Pensaba mientras se abrazaba a si mismo y sus ojos se perdían en los jardines laterales del Buckingham. Esos ojos que parecían tristes, aunque no había una razón válida — De acuerdo a lo que piensa el niño— para que sus orbes no tuviesen luz.

-"¿Que estará haciendo Sehun?"- se pregunta y se molesta por importarle el paradero del otro. -¿Por que no ha venido a verme?- renegó aun mas enfadado y en voz alta. Se tranquilizó, estaba siendo absurdo consigo mismo, y ni sabía bien que era ser absurdo.

Se revolvió los cabellos con suma frustración, algo andaba mal...

El viento silbó como intentando responderle, pero no puede hacer mas que mover sus cabellos en un calmado va y ven. No le gustaba lo silencioso que era ese lugar, prefería mil veces el Gante, aunque sabía bien que no había forma en la que pudieran volver ahí. Sehun jamás permitiría que volvieran al lugar donde mataron a todos y donde él estuviera en peligro. Primero muerto y enterrado..

Y sus pensamientos terminaban en Sehun de nuevo. Usualmente la gente normal  termina pensando en su futuro, la vida que le gustaría llevar, su boda y en quien será el padre o madre de sus hijos.- Yo no puedo darle hijos a Sehun...- dijo sin pensar, ni siquiera se había dado cuenta y era mejor así.

«Cuando no piensas lo que dices, es cuando dices lo que realmente piensas» Mejor era que Baekhyun no se enterará del maldito que escribió esa gran mentirota.

Se subió al pasa manos del balcón y con equilibrio se pudo mantener en pie.
¿Que estaba haciendo? Ni Baekhyun lo sabía, solo lo estaba llevando acabo, sin pensar en nada mas y sin titubear siquiera. Si saltaba.. ¿Por que querría saltar de todas formas? ¿se quería suicidar? No, no era eso.  Pero si saltaba.. ¿Sehun lo atraparía? Se pregunta y entonces, decidió ver que pasaba.

Abrió los brazos como si estuviera a punto de emprender el vuelo cual pichón aprendiendo a volar, y levanto un pie, dispuesto a dar un paso hacia la nada.

Vampiro: El Siniestro [sebaek]Where stories live. Discover now