¿Que pasaría si tu destino ya estaba escrito mucho antes de que lo supieras?
Lena es La Princesa de Daxam que llega a la tierra buscando algo.
Esta historia esta escrita por mi.
No estaba celosa... No para nada, solo son celos de amigas.
¡Hay por dios a quien engaño! Claro que siento algo por Lena.
¿Quien no lo haría? Lena era demasiado buena para este mundo.
Me enamoraba cada día mas, cuando me sonreía, cuando me abrazaba o cuando la veía trabajar con Maggie y seguí pareciéndose aun cachorrito perdido.
Todo en ella me enamoraba, su forma de actuar, todo.
-¿Entonces Kara?-. Dijo Lena mirándome a los ojos.
-¿Perdón? No escuche-. Dije y ella río para rodar los ojos.
-¿Que si uso este vestido o este otro para la cita que tengo con Katheryn?-. Dijo mostrándome sus vestidos.
Gruñi al oír aquel nombre, pero mire sus vestidos, tenia uno color celeste y uno negro.
-El negro-. Dije señalándolo con una sonrisa.
-¡El negro sera!-. Dijo y corrió a su habitación para cambiarse.
¿Debería decirle lo que siento? No se si aun me ame ya que la mande directo a los brazos de aquella mujer.
Pero como decía Alex, tenia que arriesgarme si no la quería perder, solo que no era el momento.
Esperaría a que volviera de su cita y le diría todo, la quiero y no esperaría más tiempo.
-¿Que tal?-. Dijo saliendo de su cuarto dejandome con la boca abierta.
Oh Rao... Se ve tan hermosa, el vestido negro se le pegaba a su cuerpo como si fuera una segunda piel, sus ojos eran más verde que nunca.
Su peinado simplemente la hacia mucho más perfecta, me atragante con mi propia saliva.
-Te... Te ves muy bella-. Dije y ella sonrió dando una vuelta en su propio eje.
Vamos Kara... Controlate, es tu amiga... Por ahora, aunque ahora de verdad que no quería que se fuera a cenar con aquella rubia.
-Gracias Kara... Estoy emocionada-. Dijo tomando su abrigo.
-Si yo también estoy emocionada-. Dije con voz frustrada.
-Me tengo que ir, gracias por venir Kara me has salvado la vida-. Dijo dándome un abrazo y yo inhale su perfume.
-Espero que te vaya bien-. Dije agitando mi mano.
Lena se marchó y espere a que se fuera para cerrar la puerta con rapidez e ir hacia su ventana y salir volando.
Me escondí detrás de unos arbustos enfrente del restaurante en que seria su cita pero me lleve una gran sorpresa a ver a Maggie también aquí.
-¿Que estas haciendo?-. Le dije alzando una ceja.
-No... ¿Que haces tu aquí? Porque yo vengo a ver si todo le sale bien a mi pequeña Daxamita-. Dijo Maggie alzando una ceja.
-Yo también vengo por lo mismo-. Dije y ella río.
-Si claro, Lena te gusta y solo te estas tardando, puedo decir que ella no esta enamorada de Katheryn pero puede llegar a estarlo si te tardas-. Dijo sonriente.
-Shu... Ahí vienen-. Dije señalando al frente.
Lena venía riendo con aquella mujer y yo rodé los ojos, yo la hago reír mas que aquella mujer.
Ambas entraron y podía oír su platica mientras Maggie se quejaba por que no podia oírlas.
-Maggie calla... Necesitó escuchar-. Dije y ella golpeó mi mano.
Ambas nos quedamos ahí hasta que salieron, su plática me fue aburrida pero bueno.
-Ve... Anda... Dile que la quieres y todo eso-. Dijo Maggie empujandome.
-No Maggie... Espera-. Dije pero ambas quedamos a la vista de todos.
-¿Maggie? ¿Kara? ¿Que hacen aquí?-. Dijo Lena en cuanto nos vio.
-Hola... Tengo una cita con Alex-. Dijo rápidamente Maggie.
-¿Tienes una cita?-. Dije confundida y ella me vio mal.
-Claro que tengo una cita, ya te lo había dicho-. Dijo ella mirándome mal.
-¿Y tu Kara?-. Dijo Lena y yo me sonroje.
-Pues me encontré con Maggie y la acompañe-. Dije y Lena no me creyó.
La rubia tomo su celular cuando comenzó a sonar, sonreí un poco al saber que la necesitaban en la NCPD.
-Lena tengo que dejarte pero me gustaría verte mañana-. Dijo dándole una sonrisa tierna.
Ambas se despidieron mientras Maggie huía como una cobarde, cuando la vea de nuevo le reclamare por dejarme sola.
-¿Nos vamos?-. Dije cuando Lena volteo a verme.
-Claro... Pero tienes que decirme que haces aquí-. Dijo y yo rodé los ojos.
-¿No puedes olvidarlo y ya?-. Dije y esta negó riendo en voz alta.
-¿Entonces quieres saberlo? ¿De verdad?-. Dije de teniéndome enfrente de un auto.
-Si Kara quiero saberlo-. Dijo cruzándose de brazos.
-Bien-. Dije dándole una pequeña sonrisa.
Para después agarrarla de su abrigo y pegar sus labios a los mios en un beso dulce.
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Trate de trasmitirle lo que sentía por ella en tan solo un beso, ella poso sus manos en las mías y correspondió mi beso haciendo que sonriera.
Nos alejamos para podernos mirar a los ojos.
-¿Que es lo que acaba de pasar?-. Dijo con voz agitada.
-Lena yo... Siento algo por ti y fui muy tonta, quiero intentar algo pero.... ¿Quieres ir a una cita conmigo?-. Dije dándole una sonrisa.
-¿Ahora?-. Dijo ella sonriente y yo asenti con la cabeza.
-Si, podemos ir adonde tu quieras-. Dije tomando su mano.
-¿Podemos ir por una hamburguesa?-. Dijo sonriente apretando mi mano.
-¿No prefieres pizza?-. Dije alzando una ceja para comenzar a caminar.
-Nana... Iremos adonde yo diga-. Dijo Lena y yo hice un puchero.
-Pero antes que vayamos por mi hamburguesa... ¿Estas segura de lo que sientes por mi? ¿Segurita?-. Dijo dándome una peque sonrisa de lado.
-Lena esto es lo que quiero... Quiero estar contigo y lamento a verme tardado-. Dije apretando su mano.
Ella sonrió y comenzó a caminar hablando de que ahora entendía aquella vez que rompí mi cuchara.
Ambas entramos al local mientras Lena pedía con una sonrisa lo que quería yo no podía dejar de mirarla y sentirme bien al saber que estaríamos juntas.
