I'm not your stereotype

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Maratón (4/?)

Él se está acercando, siento su respiración en mi cuello mientras que con sus manos me inmoviliza contra la pared. Intento luchar contra los besos que me deja marcados sin embargo se vuelve algo increíblemente imposible, una risa seca aparece sobre mi oído y hace que todo en mi se vaya a la mierda.

Deseo probar sus labios, con gusto a menta fresca, tan adictivos como prohibidos. Intento zafarme de su agarre pero no me lo permite y se detiene para ver que mis ojos están tan deseosos como los mío.

Sonríe acercando sus labios hacia los míos para lograr rozarlos y alejar su boca de la mía, veo que le gusta hacerme sufrir ya que pega su cuerpo contra el mío generando que nuestros sexos sean presionados uno contra otro. Un gemido es liberado desde lo profundo de mis entrañas atravesando cada parte de mi garganta y cuando sus manos sueltan mis muñecas, uno con cierta desesperación nuestros labios.

Mueve su boca de un lado a otro, su lengua juega con la mía mientras siento que sus manos recorren cada parte de mi cuerpo asimétrico, sus caderas se comienza a mover al compás de las mías haciendo que deba cortar el beso en el clímax del mismo para conseguir aire. Mis manos, que estaban en su cabello, descienden lentamente por su espalda. Acaricio cada músculo logrando que bajo mi toque se comience a tensar, coloco mis manos sobre sus nalgas atrayendo su cuerpo contra el mío, deja escapar una risa y muerde mi labio inferior para luego unir nuestros labios.

Mientras los segundos pasan, la ropa se va despojando de nuestros cuerpo; primero su saco junto a su camisa de algodón y le siguió mi suéter con la camisa negra.

Su forma cortés con la que me toca me hace sentir delicada, frágil y por alguna extraña razón me enciende de una forma que aún no llegó a conocer. A pesar de la mierda que podría llegar a salir de su boca, esto momento, no me interesa porque lo único que quiero hacer es mantenernos así de cerca como lo estamos haciendo en este mismo instante.

- ¿Por qué yo? - Pregunta sobre mis labios acariciando los mismo con su dedo pulgar.

Sonrío picará a sentis sus manos en el centro de mi espalda buscando desabrochar la tela que cubre mi pechos, giro sobre nuestros cuerpos haciendo que él quede acorralado sobre la pared dejándome el control todo a mi.

- Gran pregunta jefe, supongo que me gustan los problemas - digo acariciando un mechón que cae sobre su rostro.

Hago que nuestras bocas se hagan una mientras mis manos acariciar su pecho desnudo, llegó al inicio de su pantalón y comienzo a acariciar su miembro lentamente sobre la tela generando que de su boca sean arrancados más de un gruñido. Muerde fuerte mi cuello cuando con sus brazos me agarra de la cintura pegando mi sexo con el suyo, sonrío de lado sabiendo que está tan duro como yo de humeda.

- Tendremos que dejarlo para la otra, cariño. - Me separo de él fuertemente y agarró mi camisa para colocarla logrando cerrar la puerta antes de que él reaccione.

Parpadeo frotando mis ojos, recordar el sueño intenso que tuve con el señor Styles no es nada bueno y no es que quiera decir que los sueños no son buenos sino que sé que no esta bien.

En primer lugar; no me puede gustar un tipo como Styles ya que es un arrogante, engreído de primera y en segundo lugar ¿¡Qué hago teniendo sueños húmedos con un hombre como él!?

Miro la hora... No otra vez.

No me odien. JAJAJA

Bsos Vic :)