DECISIÓN

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3.- DECISION

Ya había amanecido y Sakura estaba segura de que unas ojeras estaban instaladas bajos su ojos, por más que había tratado dormir su mente parecía dispuesta a arruinar su noche y lo había conseguido. Ahora se encontraba boca arriba, pensando en cualquier cosa que no fuera su sensei, en el beso con su sensei o en la novia de su sensei. Pensaba en comida, era una buena forma de distraerse pero ahora tenía hambre.

Unos golpes llamaron su atención, alguien tocaba en su ventana. La ninja levantó la vista y quien menos esperaba estaba ahí.

-¿Qué quieres?- no quería sonar tan gruñona pero tenía hambre y no era el mejor de sus días.

-Me entere de que era tu día libre-

-¿Y?

-Entrena conmigo Sakura-chan- La ninja le dio la espalda a modo de respuesta –Vamos, hace mucho que no entrenamos juntos. Desde que llegue de mi entrenamiento con Ero-sennin apenas y hemos tenido un respiro- Naruto abrió la ventana de su habitación y entró decidido.

-Tengo hambre Naruto- la ninja admitió dispuesta a ser mas amable con su amigo, era quien menos debía pagar su mal genio.

-Te invito a comer ramen- el tono alegre de él comenzaba a contagiarla. –Será como una cita-sugirió con galantería pero la ninja rió fuertemente.

-De acuerdo Naruto- cedió por fin –Solo dame unos minutos para cambiarme- Pero el ninja no se movió ni un centímetro. –Necesito que salgas- le recordó.Su amigo se sonrojó y salió por su ventana con una sonrisa. La ninja comenzó a cambiarse, estaba decidida a no amargarse por los últimos acontecimientos, ¿Y qué si le gustaba su sensei, y qué si él ya tenia una hermosa novia?, no era el fin del mundo. Sería más fácil si no le viera tan seguido.

..............

Sakura y Naruto comían ramen en Ichiraku, la ninja le prestaba toda la atención a su amigo que contaba como había sido su entrenamiento. Frecuentemente la hacia reír con algunas de sus anécdotas.

-Hola chicos- una voz a su espalda los saludó y su pulso se aceleró instantáneamente. Era mas fácil decir que se olvidaría de él que hacerlo, si con el solo sonido de su voz su corazón ya parecía salirse de su pecho no había muchas esperanzas.

-Hola sensei- Naruto parecía feliz de tenerlos a todos reunidos –Sakura-chan y yo estamos en una cita- la ninja apenas creía lo que escuchaba.

-¿De veras?- Su sensei parecía bastante sorprendido y le dirigió una rápida mirada de reproche a su alumna. Ese no era asunto suyo.

-Sí y después entrenaremos juntos- Naruto parecía orgulloso de sus planes y la ninja no quería arruinar su felicidad así que dejó que hablara.

-Pensé que era tu día libre Sakura- su sensei se colocó detrás de ella y podía sentir sus palabras contra su oído. Un escalofrío la recorrió.

-Lo es, pero no me molesta pasar el día con Naruto- siguió comiendo fingiendo desinterés.

-¿Quiere venir sensei? - Naruto no parecía darse cuenta de la tensión entre ambos.

-Tal vez en otra ocasión- se despidió dejándolos solos. La ninja pudo comenzar a relajarse.

.....

Sakura se relajaba bajo la sombra de un árbol, habían terminado de entrenar y ahora estaba exhausta. A pesar de eso, lo había disfrutado; claramente era mucho más fuerte que ella pero al menos no terminaba sobre el suelo. Además Naruto era más considerado, media su fuerza en sus golpes y cuando lograba asestar uno inmediatamente le preguntaba si deseaba continuar. Siempre tan protector. 

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