Mike

Capitulo 1

Escucho el timbre de la campana indicando que él último día de clases ya había terminado, suspiro y sonrío —has sobrevivido—me digo a mí mismo, hago un baile de victoria en mi cabeza.

Abro mi casillero y echo las carpetas y libros que tengo en el a mi mochila veo como los pasillos de la escuela van quedando vacíos y las puertas de los salones se van cerrando.

Algunos maestro encienden un cigarro y suspiran otros simplemente salen corriendo de la escuela.

Termino de limpiar lo que hay en el casillero—hola Harry—dice una vos femenina atrás mío, yo volteo y sonrió forzosamente— Hey que tal Alison—digo y ella se me acerca aún más colgándose de mi cuello—haré una fiesta en mi casa celebrando que terminamos el año todos los del último curso estarán ahí y tú también tienes que ir—dice ella dándome un beso en los labios que yo no sigo.

Me le quedo viendo unos momentos y pongo a meditar mi respuesta podría estar en casa quedarme a estudiar para el examen de ingreso a la universidad, volteo los ojos mis padres quieren que me formé y me instruyan para ser abogado.

Pienso unos minutos más en la fiesta no faltará alcohol eso es seguro un buen polvo no estaría mal, le sonrió a Alison —claro que estaré ahí, ¿a qué horas es?— digo pareciendo amigable.

Ella salta de emoción yo no digo nada sé que le gusto pero no quiero darle falsas ilusiones simplemente no es mi tipo—es a las siete, en mi casa—dice ella y me suelta del cuello—bueno pues ahí estaré—digo ella me da un beso en la mejilla y después se marcha.

Me cuelgo la mochila y salgo de la escuela al pisar afuera, me volteo y saco el dedo del medio—te puedes ir a la mierda ya — digo dirigiéndome al edificio de dos pisos de color blanco y azul.

Saco las llaves de mi carro del bolsillo y subo en este al abrirlo—tres años más de carrera Harry y podrás hacer lo que tú quieras—me repito a mí mismo.

Pongo música a todo volumen en el coche, mis manos están encarnadas al volante casi como si la cobertura del volante fuera otra piel o parte de mis manos.

Tomo el camino más largo para llegar a la casa a mi "perfecta" casa con mi "perfecta" familia.

Pasó por un barrio que conozco  a la perfección y solo para ver una casa en específico, una pequeña casa color blanco que el ambiente hogareño se puede sentir a kilómetros, pasó por ahí lentamente y tal y como siempre a las cuatro en punto la familia se sienta en la mesa a comer.

Todos reían ya que al parecer el padre había dicho algo sumamente gracioso la madre acomodaba los platos y uno de sus hijos le ayudaba a servir la comida, estoy en una batalla de contener las lágrimas—tanto le tiene que costar a mi familia ser de esa manera—digo mientras suelto el freno del carro para poder seguir avanzando.

Al llegar a la casa me estacionó enfrente y volteo a ver el estacionamiento el carro de mi padre el de mi madre y el de mi hermano estaban aquí, volteo los ojos no es una sorpresa el último día de cada fin de curso terminado hacen  esto solo para recordarme  a mí y a mi hermano que seguía y que debemos de hacer.

Pero claro para mi hermano nunca fue difícil complacer a mis padres ya que el teniendo 23 años había sacado un doctorado tenía una gran carrera y estaba haciendo mucho dinero esos pequeños pedazos de papel que a a mis padres tanto les importan—golpeó el volante una y otra ves hasta que los nudillos me quedan rojos