Capitulo 7

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Me subo al carro y aún tengo la respiración agitada, golpeó el volante una y otra vez —eres idiota ¿verdad?—me digo a mí mismo.

No puedo creer que haya dejado que ocurriera eso—pero te gusto ¿no es así?—dice mi mente y yo pego mi cara contra el volante, ¿me gusto? ¿Por eso continúe el beso?, ¿me gusta Mike?—si te gusta—digo en mi mente.

Niego repetidamente, no esto no me puede estar pasando a mí, olvidare a Mike eso es lo que haré, nada de esto nunca sucedió, tendré que pasar por esa estupida cena, aceptaré el compromiso, me casaré con Alison y perfecto me olvidaré de él y me ganare el respeto de mi padre.

Enciendo el auto—pero tú no quieres eso ¿verdad?, no lo quieres dejar ir—dice mi mente y yo solo piso el acelerador, es verdad yo no lo quiero dejar ir.

Siento como las lágrimas cae en mi cara—tienes que dejar ir a Mike—me digo a mí mismo, si lo tengo que dejar ir y eso es lo que haré.

Conduzco con demasiada prisa y me estaciono enfrente de mi casa, cierro la puerta del carro con fuerza y el sonido retumba en toda la calle.

Abro la puerta de mi casa y suspiro—todo es connerie (mierda)—digo la palabra en francés para que nadie logre entenderla, por si logran escucharla.

Escucho cómo alguien se pone detrás de mí—J'ai aussi étudié le frère français, alors faites attention à votre (yo también estudié francés hermanito, así que cuida tu boca)—escucho el peculiar acento de la voz de mi hermano, me volteo y lo veo riéndose.

Me mira de arriba a bajo —¿de dónde vienes?—yo lo miro con disgusto—eso a ti no te importa—le contesto y el suspira —Harry sabes que te quiero, no te diré nada, solo mantente a salvo—al decir eso me toca un hombro—te quiero, lo sabes ¿verdad?—dice esto y yo bajo la mirada—no lo parece–susurro y su apretón se vuelve más fuerte—descansa un rato y date un baño para hoy en la noche—dice el y yo suspiro, no digo nada y subo a mi cuarto.

Al entrar me dirijo al baño y cierro la puerta de este, me deshago de mi ropa y entro en la helada ducha, suspiro y me dejo llevar por esa lluvia artificial que cae en mi espalda.

Mis pensamientos no se pueden callar por un rato, Mike, te gusta Mike, te beso, ese beso, te gusto verdad, saboréalo por qué no habrá más, no habrá más...

No volveré a ver a Mike...

No lo haré parte de mi vida...

No dejaré que mis emociones fluyan...

Tomo una toalla y me la amarro a la cadera, mis pensamientos no me dejan y eso me frustra más de lo que uno se imagina.

Salgo del baño y me dirijo a la puerta de mi cuarto a cerrarla con candado, quiero privacidad un rato, conecto mi celular y veo la hora son las dos de la tarde, tengo tiempo para dormir una siesta y no pensar en nada.

Conectó mi celular y pongo una alarma para las seis, me pongo un bóxer y me echo en la cama, siento reconfortante, sentir las sabanas frías—pero estaría aún más reconfortante si Mike estuviera aún lado ¿no es así?—dice mi mente, quito ese pensamiento de mi cabeza—solo duérmete—me digo a mí mismo y cierro mis ojos.

La alarma comienza a sonar y eso me indica que ya casi es hora de que llegue Alison con su familia para cenar, me levanto de la cama y me dirijo al baño, me cepillo los dientes y me peino .

Mike Where stories live. Discover now