Enamorada de un Original [Klaus Mikaelson] {TERMINADA}.

Capitulo 1

Vale, a ver, jeje. Vuelvo a aparecer después de mi años y de verdad no tengo escusa. Esto es una pequeña prueba, quiero que leáis el capítulo pues tiene mejor ortografía y un poco mejor construida la estructura. POR FAVOR LEEDLA.

Después de bajar del avión y coger el taxi hacia la ciudad a la que me dirigia, al cabo de media hora ya estaba caminando por las calles de Nueva Orleans, seguía igual que la última vez que estuve, 1960, pero a diferencia de esa maravillosa época había una gran diferencia en el antes y en el ahora. Que ahora mismo hay demasiados humanos.
Caminé por los escaparates de una calle no muy habitada. Una pequeña tienda llamo mi atención, sentía esa pequeña magia que sienten los seres sobrenaturales lo que parecía que había brujas ahí dentro por lo que decidí entrar. Dentro de la tienda había muchos objetos, puede que algunos de valor y otros no. Algunos parecían objetos relacionados con la magia negra.

-¿Quien eres?.-Dijo alguien detrás de mí, por lo que me gire lentamente, ya que no presenciaba ningún peligro, y vi a una chica, baja, morena y al parecer algo temerosa.- nunca te he visto en la ciudad, aunque desde que ellos llegaron muchos vampiros vienen.

-¿Ellos? Y acabo de llegar hoy

-Ya sabes quiénes son, los Mikaelson, pero los vampiros no suelen entrar en las tiendas de brujas de la ciudad.

-Bueno, busco...-antes de decir nada me veo interrumpida por un grupo de chicos que entran en la tienda algo revueltos y divertidos.

-Clarie.-Un chico de pelo rizado, pelirrojo y tez muy blanca.-te lo advertimos.-soltó una carcajada como si le hiciera verdaderamente gracia esa situación.- te advertimos que no hicieras magia y tu has rotos las normas de Marcel.-Frunci el ceño al escuchar lo que dijo. "Normas".

-Mi hermana estaba enferma.-Miré a la chica de reojo y vi claramente un sentimiento muy poco visto en las brujas, temor.-por favor.

-Las normas son las normas.-Tan rápido como pudo la cogió del cuello.-despídete brujita.

Antes de que le pudiera desgarrar la garganta cogí al chico por el brazo, empujándolo con toda la fuerza que podía y choco contra la pared haciendo que está se hundiera un poco.

-Es de mala educación tratar así a una señorita.-Dije sacudiéndome el poco polvo que había alcanzado en hombro.

-¿Quien coño eres tu?.-dijo otro chico muy delgaducho, vestido completamente de negro.-¿Piensas que vas a marcharte sin pagar por lo que has hecho? Impedir la justicia.-Se abalanzó contra mí cogiendo mi cuello con fuerza, pero yo no me moví ni un centimetro, alce mi mano y dirigiéndola hacia el pecho del chico. Hundiendo con desdén los dedo, al sentir su corazón clave las uñas en el y al segundo se lo arranqué sin ningún remordimiento.

-Alguien más.-Dije mostrando el corazón en la palma de mi mano. Todos los presentes, exceptuando a la Clarie, se echaron hacia atrás, mirándome con cara de asco e ignore esa mirada. Una vez que se fueron me acerqué para ayudar a la pequeña bruja a levantarse.-¿estas bien?.-Mira mis ojos fugazmente a lo que sonreí, no parecía muy contenta de que un vampiro la haya salvado.- y ahora que he salvado tu vida, vas ha explicarme porque esos vampiros han venido de esa forma, ¿que es eso de las normas?.- Pregunté mientras me acomodaba en una vieja silla.

Me explicó detalladamente todo lo que había pasado durante años atrás en esa maravillosa, aunque a veces endemoniada. Como ese Marcel había echo que las brujas no pudieran hacer magia y si desobedecían estaban condenadas directamente a morir sin ningún miramiento, también me explico que habia echado a los hombres lobos de la ciudad. Y que ahora gobernaba junto a otro vampiro por ser el derrotado.

-¿Quién es el vampiro que gobierna con el ahora?.-Pregunté aunque en mi corazón sabía quién era ese vampiro.

-Un original.-Una sonrisa ladeada se mostraba en mi rostro al confirmar mis sospechas.-se llama Klaus.

Le di las gracias a Clarie por la información que me había ofrecido y haciéndole saber que ningún vampiro le haría daño. De nuevo en la calle, comencé a caminar sin saber dónde ir. Una sensación invade mi interior, una pequeña desesperación por encontrarlos, en especial a Klaus porque desde que tengo esos extraños sueños esa es la sensación que tengo, ya que no recuerdo que él me sometiera a ningún control, lo conozco el no es así, ya que somos como hermanos. Aunque últimamente una pequeña duda crece en mi interior. Al ir sumergida en mis pensamientos no me doy cuenta y tropiezo con alguien que cae al suelo.

-Lo siento.-Digo ofreciéndole mi mano a la persona que había caído. Era una chica, mirándola mejor...era una loba, embarazada, pues tenía barriga algo notable.

-No pasa nada.-Niega rápidamente y sigue caminando sin hacer contacto visual conmigo.

-Adiós.-Me despido con un ligero movimiento de cabeza

Sigo buscando a Klaus, se que podría preguntar a alguien, pero yo no era de saber la respuesta sin antes resolverla por mi cuenta. De repente el nombre de Marcel viene a mi mente, pensándolo mejor, recuerdo a alguien llamado así, cuando estuve en Nueva Orleans hace un tiempo, pero no era más que un vampiro novato.

-Nadia, ¿eres tu?.-Dijo una voz sorprendida y con una pizca de alegría en ella, y era alguien que  conocía bastante bien.

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Bien, si habéis leído el capítulo sólo quiero que me digáis si os a gustado y si queréis que siga modificando la primera temporada o que termine la segunda temporada, es algo importante para mi. GRACIAS