Capítulo 12

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¤Verdad Genuina¤

¡Qué maldición todo esto!, ya no podía, no quería nada.

Podría desaparecer por un buen tiempo, pero no ganaba nada con eso, tenía que asegurarme a mi misma que si lo lograría.

Costará lo que costará.

Chris apareció de la nada, se acercó a mi y tomó mis manos.

-Saldremos de esta, juntos.

Lo mire por largos segundos.

-¿Estás seguro?, ¿No te dan ganas de rendirte? ¿Cómo lo haces para mantenerte fuerte? - Le pregunté intentando alargar ese momento.

Se acomodó a mi lado y respondió:

-Pues, confío en mi, confío en que puedo llegar a hacer cosas que nadie ha podido hacer - Tomó mi barbilla e hizo que lo mirara a los ojos - Confío en que puedo llegar lejos.

Y me rodeó con sus brazos. El tiempo pasaba muy lento hasta que sentí un dolor profundo en mi muñeca, ese maldito número.

El 46 se transformó en 45.

-¿Qué es eso? - Preguntó Chris.

-Es... un recordatorio.

Me dispuse a caminar en dirección a mi hermano. Chris iba a mi lado.

-¿Recordatorio?, ¿De qué? - Su voz mostraba confusión, se estaba alterando.

-De cuantos días me quedan para liberar a los ángeles, anoche apareció, hoy cambió, es como una cuenta regresiva - Le conteste con mucha calma.

-¿Y quien te la marcó? - Ya no estaba calmado, intentaba disimular.

Llegamos a la entrada del prado y ahí estaba Liam.

-Creo que ahora es más importante hablar con Liam, ¿No crees? - Le respondí a Chris.

-¿Hablar de que?, no me digas que le piensas contar todo lo sucedido, es imposible, Lily - Sentí como sus ojos lanzaban llamas, no sólo por lo de Liam, sino por lo de la marca.

-No es sólo eso, mi hermano estuvo en la montaña de los elementos, puede saber algo, su testimonio puede servirnos - Lo mire y vi que fui capaz de convencerlo.

Avancé hasta Liam, pero una mano me retuvo.

-Luego hablaremos de la marca, Lily - Dijo Chris intentando calmar su furia.

No le respondí nada, pero sabía que íbamos a tener una conversación intensa.

Me senté al lado de mi hermano y apoye mi cabeza en su hombro como cuando éramos pequeños

-Ahora, podemos hablar de todo lo que quieras - Le dije - Pero yo también tengo unas dudas.

Levantó su cabeza, nos miró a Chris y a mi. En sus ojos vi que estaba dispuesto a responder cualquier tipo de pregunta.

-¿Puedes contarme como fue que te secuestraron?.

El aire sin ruidos era un tanto perturbador, nuestras voces era lo único que se podía oír.

-Estaba en el garaje intentando limpiar el auto viejo de papá, el escarabajo amarillo, ese que tanto te gustaba - Se dirigió a mi, haciéndome recordar viejos momentos - Estaba tan concentrado que no me dí cuenta que había un hombre a mi lado vestido totalmente de blanco. Le pregunte que necesitaba y me respondió que quería a la salvadora y que yo sabía donde estaba. Quede confundido, obviamente, y le dije que no sabía de lo que estaba hablando. Me pidió que lo siguiera y eso hice, hasta que sentí un dolor en la cabeza y me desmaye.

Un Ángel Volador © (LIBRO 2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora